Depredador Alcaraz
El murciano de sólo 17 años gana a Goffin, 14º mundial, para acceder a los octavos de final ante Monteiro (83º)
Carlos Alcaraz inició su camino en las Melbourne Summer Series con un triunfo casi imposible de analizar. Con 2-2 en el marcador, Attila Balasz se retiró por lesión, por lo que era toda una incógnita cómo afrontaría el murciano el que iba a ser el partido más importante de su carrera hasta la fecha. Sin olvidar que al aterrizar en tierras australianas se vio obligado a cumplir un confinamiento estricto, sin salir de su hotel en 14 días como consecuencia de un positivo en COVID-19 que viajó en su mismo avión. Tirando de creatividad e ingenio para ponerse a punto en la habitación, se presentó a la pista frente a David Goffin, número 14 del ranking ATP, al que batió para demostrar que ha llegado a la élite del tenis para quedarse. Por el resultado, cualquiera diría que fue su primer triunfo ante un top-15, y con tan sólo 17 años: doble 6-3 en 63 minutos. Arrollador.
Alcaraz comenzó el duelo como un ciclón, crecido ante la oportunidad de demostrar el grandísimo talento que atesora. Nada de arrugarse ante un rival que fue número 7 del mundo y que goza del privilegio de haber ganado en su carrera al Big Three completo (Roger Federer, Novak Djokovic y Rafa Nadal), además de dominar a otro ganador de Grand Slam como es Dominic Thiem: siete triunfos sobre el austriaco.
Aunque el español rozó una efectividad plena de breaks en el set inicial (tres de cuatro oportunidades convertidas), Goffin equilibró las fuerzas en el segundo. El pupilo de Juan Carlos Ferrero, sólido y sin descentrarse, siguió moviendo a Goffin de lado a lado de la pista para desgastarle hasta que en el quinto juego aprovechó su opción. Tras dejar fuera al primer cabeza de serie del Great Ocean Road Open, Alcaraz se medirá con el brasileño Thiago Monteiro (83º) en octavos.
En rueda de prensa aseguró que se encuentra “muy bien físicamente” a pesar de la estricta cuarentena a la que se vio sometido: “Durante el aislamiento intenté mantener el tono físico y seguir el plan fijado al pie de la letra. Tengo muchas ganas de conservar este nivel de cara al Grand Slam. Al final del encuentro estaba muy contento tras encontrarme con mi entrenador, Juan Carlos Ferrero, y Pablo Carreño. Siempre juego con la creencia de que puedo vencer a cualquiera”. Hambre y mentalidad de ganador.
Ambición “Siempre juego con la creencia de que puedo vencer a cualquiera”
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