Soñar con un imposible
La Real intentará lavar su imagen del bofetón de la ida ante el United ● Imanol reserva a Silva e Illarramendi
Es imposible, dijo el orgullo. Es arriesgado, dijo la experiencia. No tiene sentido, dijo la razón. Inténtalo, susurró el corazón”. Esta célebre frase puede resumir perfectamente el estado de ánimo con el que afronta la Real el partido de vuelta de estos dieciseisavos de final de la Europa League contra el Manchester United. Después del 0-4 de la ida (en Turín, aunque fueran locales los donostiarras), todo está perdido. O eso es lo que dice la razón. El corazón, que es la base de todos los aficionados al deporte, deja todavía un pequeño resquicio para la esperanza. Especialmente, para los más optimistas. Eso es lo que buscará la Real en Old Trafford. No parece que haya mejor escenario para fantasear que el mítico ‘teatro de los sueños’.
Eso sí, el potencial de los diablos rojos hace una semana fue tan descomunal que casi ridiculizó a los donostiarras. El reto primero es competir con este Manchester en su casa, con lo que ello conlleva. Porque salvo algunos minutos aislados, en Turín no fue capaz. Imanol y sus chicos se han marcado la idea de lavar su imagen.
El mensaje que se le lanza desde el vestuario es que de reojo se está mirando a la visita a Valdebebas del lunes. Con el ‘pescao vendido’, Imanol ha dejado en Donostia a su capitán, Illarramendi; a su principal jugón, Silva; y a Carlos Fernández, con el que no ha querido arriesgar a pesar de estar recuperado de su lesión. Es evidente lo que le pasa por la cabeza a Imanol. Por eso, no es descartable que haga rotaciones en el once inicial y que algunas de las llamadas principales referencias del equipo se queden de inicio en el banquillo. Monreal, Oyarzabal y Portu apuntan a descansar. Isak estará de salida, salvo que Imanol sorprenda con Bautista. Pequeños detalles que se convierten en mensaje y que reflejan que, si en la Real quieren soñar, lo van a hacer de forma moderada.