El racinguismo empieza a pedir algo más que ganar
La entrada de Beobide y Óscar busca una vuelta de tuerca
Esta es la cuarta temporada del Racing en Segunda B. En las tres campañas anteriores quedó primero en la liga regular y ahora lleva tres, seis y ocho puntos más, tras 26 partidos, que los que sumaban los equipos de Felines, Paco y Munitis, respectivamente. El problema es que al racinguismo empieza a pedir algo más. Quiere que su equipo no solo gane, quiere que sea mejor, que mande, que meta miedo..., y eso hace meses que no pasa. En el vestuario lo reconocen, lo acusan los lunes, en la reflexión postpartido en el vestuario, pero a partir del miércoles vuelven a priorizar los números por encima de las sensaciones. Hoy, ante Osasuna B, el equipo al que han ganado con más autoridad en toda la temporada, tienen la oportunidad de dar a la afición la alegría que se merece.
Retoques. Además del obligado relevo en el lateral derecho, Gándara por el lesionado Córcoles, y del cantado regreso del indiscutible Samuel al centro de la defensa, probablemente en lugar de Israel Puerto, Viadero medita dar una vuelta de tuerca al equipo con la entrada de Jagoba Beobide y Óscar Fernández.
El vasco es un medio centro ‘tipo Busquets’, de los de menos es más. Menos toques, más velocidad del juego. Menos espacios, más robos de balón. Menos regates, más seguridad. Lo más probable es que empiece con Peña, pero también Sergio Ruiz y Javi Cobo tienen condiciones para mezclar bien con Beobide. Alberto, del mismo corte, puede ser el pagano de la llegada del guipuzcoano.
Por lo visto ayer en la última sesión, Óscar por la derecha y Santi Jara por la izquierda, Viadero quiere sacar provecho a la punta de velocidad con la que ha vuelto el de Renedo.