¿Y si jugase Casilla en San Mamés?

Keylor nos preocupa a todos. El costarricense está sumido en una crisis aguda de falta de confianza (de ahí a la pérdida de autoestima hay un trecho muy corto) y creo que Zidane debería tomar ya una decisión. Fui un gran defensor de la continuidad de Keylor en el Madrid en el verano de 2015. No soy dudoso con el tico. El curso pasado fue un baluarte (sólo 31 goles encajados en 45 partidos) y ayudó al equipo a ganar la Undécima. Pero es absurdo negar que desde que se operó este verano ha dejado de ser el portero milagrero que se había ganado el fervor del Bernabéu. Ahora hay un rumor en la grada cuando le disparan. La afición empieza a dudar de él y eso es terrible para cualquier portero. Toca mojarse. ¿Por qué no alinear en San Mamés a Kiko Casilla?

El canterano ha estado notable en sus escasas apariciones. Casilla evitó un desastre en el Pizjuán en la vuelta de la eliminatoria de Copa con los hispalenses y en Vigo tuvo tres intervenciones magníficas. En esta Liga le paró un penalti a Osasuna en el Bernabéu y también en la ida copera con el Sevilla salvó dos goles en dos mano a mano imperiales. Kiko Casilla es de la casa y sabe cuál es su rol. No se quejará en público por su suplencia. Pero la meritocracia consiste en poner al que está mejor. Y si ese es Casilla, ¿por qué no alinearle de inicio este sábado en Bilbao?