Rodríguez: “Sería la leche estrenarme en este Giro”
A los 22, busca su primer triunfo como profesional
Cristian Rodríguez cumple su segunda temporada con el Wilier. Natural de El Ejido, firmó por la escuadra italiana después de formarse durante dos temporadas con el Caja Rural amateur: “Le agradezco al Caja cómo empezaron a moldearme y la oportunidad de dar un paso adelante en mi trayectoria. Ante la falta de oportunidades en España, en 2015 surgió la posibilidad de venir al Wilier y no lo dudé. Ya manejo bien el idioma y me encuentro feliz e integrado en el equipo. Me gusta Italia”. También ayuda compartir maillot con un compatriota, Julen Amezqueta.
El andaluz afronta su segunda participación en el Giro, porque debutó en 2016, con 21 años recién cumplidos: “Aquella experiencia me ayudará a desempeñarme mejor en la carretera. Terminé muy cansado en 2016, así que pretendo aprender y crecer más como corredor. En el Wilier confían en mí, por lo que trabajo muy duro para sacar resultados. Deseamos meternos en el mayor número de escapadas para conseguir alguna victoria”.
En esta campaña ha concluido en cuarta posición el Giro de los Apeninos. Y aterrizó con buen feeling en la salida de Cerdeña, como demostró luego en la cuarta etapa, durante la ascensión al Etna. Marchaba en el grupo de los favoritos, pero pinchó: “Llevaba piernas, qué pena la mala suerte. Aparte de la avería, tardé bastante en el cambio de la rueda. Casi logro contactar a dos kilómetros para la meta, pero entonces aceleraron Dumoulin y Zakarin”.
¿Y qué sintió al codearse con Nairo o Nibali? “Buah, menudo subidón. Me vi bien, sabía que no me iban a descolgar. Aunque otras veces notas que te falta un puntito, en el Etna debí acabar con ellos”. De cara al segundo final en alto, el Blockhaus (mañana), Rodríguez pretende seguir de nuevo la estela de los aspirantes al título… y quién sabe: “Poco a poco. Aunque no quiero presionarme, me exigiré estar lo más arriba”. Fino escalador y ganador de la Vuelta a León en 2015, sueña con estrenarse como profesional en el Giro 100: “Sería la leche, lo daré todo”.