El Betis mira arriba y se acaba el efecto De Biasi
Los de Setién vuelven a Europa. Hubo polémica arbitral
El Betis ganó su cuarto partido de cinco en casa y se vuelve a colocar en puestos europeos a costa del Alavés, que sigue hundido en la tabla y con una sola victoria en su casillero. El equipo verdiblanco ganó con dos zarpazos, uno en cada parte, pero sin el brillo futbolístico de otras ocasiones. El equipo vitoriano sólo reaccionó en la segunda mitad pero entonces se encontró con Antonio Adán, inspirado como tantas otras veces, y con alguna polémica arbitral que no le favoreció. Tras ganar en su estreno, Gianni De Biasi ha perdido dos veces seguidas: parece que, de momento, se acabó el efecto revulsivo del entrenador italiano.
Fue un Alavés acorazado atrás, con tres centrales, dos pivotes defensivos, dos centrocampistas por delante y una isla, Munir, en ataque. El delantero hispano-marroquí reclamó penalti de Mandi (lo pareció) en uno de los escasos acercamientos de su equipo antes del descanso. Un primer gol repleto de lugares comunes: centro de Barragán y testarazo de Sanabria, como en el último instante del Bernabéu. Los verdiblancos son los que más tantos han hecho de cabeza en los cinco grandes campeonatos europeos, ocho.
Un centro de Pedraza, otro de Wakaso que no encontraron rematador y una posible pena máxima reclamada por Munir fueron la única producción ofensiva vitoriana en el primer tiempo.
Algo debió decirle a sus hombres De Biasi, pues mereció el Alavés el empate en la segunda mitad. Una jugada maradoniana de Pedraza, que esquivó a seis rivales, la salvó Adán con una magnífica parada abajo y tras otras dos buenas intervenciones del portero, el asistente de Trujillo decretó fuera de juego (inexistente) cuando Munir se dirigía solo hacia el gol. Se le fue acabando la gasolina al Alavés bajo el calor excesivo de la sobremesa sevillana y lo paró del todo Alexis, que se metió en propia puerta el 2-0 en una contra para certificar la victoria verdiblanca a un cuarto de ahora del final.
Gran Adán El meta salvó al Betis en el momento clave