Seedorf sale a escena
El Betis examina al holandés y su propia ambición
Después de una larga y convulsa semana el Deportivo vuelve a escena. Lo hace sin Cristóbal, en descenso, con Muntari a prueba y Clarence Seedorf en el banquillo. El holandés se estrena en España como entrenador con una misión que no es menor: reflotar a un equipo hundido.
Su llegada ha acaparado todos los focos durante estos días. La afición deportivista reaccionó a su fichaje con sorpresa y algo más que dudas. Pero en pocos días el ex del Madrid ha cambiado la tendencia. Dobles sesiones, comidas todos juntos, capitán a su elección, concentración del equipo... Una batería de medidas para reanimar al enfermo que han sido muy bien acogidas por una hinchada harta.
Su primera piedra de toque será un Betis asentado en media tabla que tiene que decidir si va a luchar en serio por asaltar Europa o se queda en la mediocridad de un proyecto teóricamente construido para mucho más. Setién está sacando bastante rendimiento de lo que hay, pero el equipo verdiblanco pasa del éxtasis (victoria en el Bernabéu o el derbi del Sánchez Pizjuán) al gatillazo con demasiada facilidad.
El técnico bético no ha mostrado sus cartas durante la semana más allá de apuntar el regreso a defensa de cuatro tras la lesión de Feddal. Su once es una incógnita, aunque su estilo, con presión, combinación desde atrás y verticalidad, es innegociable. En esa apuesta tiene un peso fundamental Guardado, que regresa a Riazor con unos galones y un juego que despiertan la envidia de la afición local.
También la primera apuesta de Seedorf no está nada clara, porque más allá de querer ver un equipo intenso y junto, el holandés no da demasiadas pistas. Las pocas han sido los dos últimos días con un once que junta a Valverde, Krohn-Dehli, Lucas, Adrián, Bakkali y Andone. Parece demasiada mecha para un Depor que recibe goles a la mínima. Hoy se verá la verdad de todo porque habla el único que importa: el verde.
Joaquín Si Setién vuelve a los cuatro atrás, como parece, será titular