Messi lanzó la falta con la barrera a 11,30 metros en vez de los 9,15 reglamentarios
El Chiringuito demostró que Gil Manzano situó a los atléticos más de dos metros detrás de donde correspondía
Messi dio un golpe sobre la mesa de LaLiga con un golazo... que no debió valer. El balón del 1-0 voló por encima de una barrera que estaba a 11,30 metros, más de dos metros por detrás de los 9,15 que estipula el reglamento, según demostró El Chiringuito. Es decir, Gil Manzano concedió una ventaja considerable al argentino, que luego clavó el balón en la escuadra, inalcanzable para Oblak.
Fue Nacho Tellado, el arquitecto del programa, quien elaboró la medición a través de su aplicación de simulación en 3D. La pelota, que dibujó una trayectoria curva en el aire, subió y bajó y se alejó del portero, recorrió 23,58 metros hasta colarse en la portería. Los jugadores del Atlético, casi en el punto de penalti, se colocaron a 11,30 desde donde estaba colocado el balón. Dos metros y 15 centímetros detrás de donde tenían que estar, casi la cuarta parte de diferencia (un 23,5% más atrás).
Fue un error de medición del colegiado, pues ni la barrera se retrasó, obviamente, ni tampoco Messi alejó la pelota después. Tanto el balón como los jugadores del Atlético tenían marcadas sus posiciones con el spray. A partir de ahí, el lanzamiento fue casi perfecto.
La muralla atlética la formaban, de derecha a izquierda, Gabi, Giménez, Costa, Saúl, Thomas y Koke. En la imagen se aprecia cómo Saúl y Diego Costa, los más altos, sí saltan en vertical. El resto no, quizá sopesando que Messi podría tirar por debajo, como hizo en el gol al Girona. El balón se eleva, pasa por encima del muro amarillo, desciende y Oblak apenas puede tocarlo con la mano izquierda, pero sin sacarlo. El 10 del Barça es el mejor lanzador de faltas de esta Liga y esos dos metros de más fueron letales para el guardameta del Atlético.
El equipo del Cholo era muy consciente del peligro que acarrean los libres directos cuando está delante el Barcelona. La consigna era evitar concederle esas oportunidades a Messi, que venía de marcarle un gol al Girona (raso) y otro a Las Palmas (por la escuadra contraria a donde entró el de Oblak) en apenas ocho días. El Atleti cometió sólo dos faltas en la frontal, una de Thomas y otra de Giménez, y el argentino marcó en la primera, con la barrera demasiado alejada, y estrelló la segunda en un jugador rival. En lo que va de Liga Messi lleva cinco goles de falta, más que nadie, y el último puede haber sido el definitivo en la lucha por el título.
Alerta
El Atleti sólo concedió dos faltas en la frontal y Messi marcó a la primera