Setién se alía con las virtudes
El Betis rompió la inmaculada estadística de Abelardo en Vitoria con un triunfo fabricado bajo el instintivo Setién. El cántabro dibujó otra vez un once lleno de incógnitas y encontró el premio con ellas. La realidad responde al técnico con situaciones que van tomando forma y le dan hilos de razón: Que Junior mejora las prestaciones de Durmisi o que Loren ejecuta pinceladas de puntería invita a que los actuales actores secundarios sigan siéndolo. Sobre el césped, cuatro canteranos que marcan la realidad de este equipo pese a que la planificación puso en escena numerosas piezas que aspiraban a un mayor peso.
La lucha por Europa se presenta como una realidad obligada de cara al sprint final de temporada y hay piezas que deben apuntarse de una manera definitiva a la batalla. Boudebouz sigue dejando destellos y Camarasa está lejos de responder a la expectativas que generó su fichaje el pasado verano. Diferente es el papel de Bartra: manejó ayer todos los instantes del encuentro y su llegada entregó una referencia defensiva que no existía a ese nivel. Setién cruza los dedos para que piezas tan decisivas como Joaquín y Guardado logren frescura para el tramo final del campeonato al tiempo que las miras también apuntan a Rubén Castro: el canario esbozó por momentos un rendimiento notable y sólo los goles lo separan de una titularidad merecida.