Embarba se exhibe y el Rayo se aferra al liderato
Los vallecanos no fallan en casa y el Tenerife dice adiós al playoff
Esta vez el liderato no fue fugaz ni huyó de Vallecas. Esta vez el Rayo lo retuvo por segunda jornada consecutiva. No obstante, el resultado puede parecer una ilusión óptica para un partido muy disputado. El Tenerife no bajó los brazos hasta el último suspiro, consciente de que sus esperanzas de playoff se le escapaban entre los dedos.
Empezó el encuentro con presión. Esa que se respiraba tras las victorias de Huesca y Sporting. La misma que metió el Tenerife desde el 1’. Un peligroso testarazo de Suso murió en la manopla de Alberto y el Rayo se desperezó. Asomó por la derecha: Dani frenó un trallazo de Baiano. El combate era un continuo intercambio de golpes, buscando mandar al rival a la lona.
De Tomás avisó con un zurdazo y en la siguiente, el 1-0. Embarba le sirvió un balón y RDT lo redirigió, con el interior, a la escuadra. No hay púgil más en forma: cuatro semanas seguidas marcando. Poco duró la alegría. Cuatro minutos le bastaron a Casadesús para igualar de cabeza, en una falta colgada por Iñaki. Sacó músculo el insular, también él enlaza tres choques viendo portería. Y Abdoulaye desbarató su doblete bajo palos.
Tomaron aire tras el descanso, cada uno en su esquina del ring. Y lo que el balón parado le quitó al Rayo en la primera parte, se lo dio en la segunda. Embarba botó con precisión una falta (segunda asistencia) y Álex cabeceó el 2-1. Justo cuando el Tenerife acariciaba el empate, llegó la puntilla. Embarba pasó de asistir a esculpir el mejor gol: un derechazo a la escuadra. Bajaron las pulsaciones visitantes y subió la excitación local. El sueño parece más asequible en Vallecas. Allí suman ocho envites sin perder. Allí todo es posible.