Un día entre aplausos
Muniain y un Betis dormido alegran a San Mamés
Tras una semana de declaraciones cruzadas entre algún jugador y el técnico del Athletic, denotando que el río baja revuelto, y aturdido como andaba el equipo rojiblanco, nada más terapéutico que un Betis que ya ha rebasado su meta hacia la clasificación europea y ahora solo trata de mejorar posición, que no es moco de pavo. San Mamés estuvo por aplaudir esta vez: al equipo, Puyol, Joaquín, Muniajn... fuera pitos al fin.
Los leones encontraron la anestesia perfecta, un equipo a ritmo de elefante en dura digestión, impuntual, que no llegó al partido hasta el sorbo final, y se montaron una tarde recreativa. Parecían ambos almas gemelas, con esquemas calcados, esto es, tres centrales, dos carrileros largos un mediapunta y dos arriba. Ziganda por fin dio con la tecla. El 5-3-2 naufragó en Girona y anunció que no dejaría pasar el año sin probarlo de nuevo. Al fin y al cabo, Núñez, Iñigo y Yeray son tres de sus mejores hombres y hay que inventar lo que sera para ponerles al mismo tiempo.
Williams persiguió el indulto tras 16 meses sin marcar en Liga en casa; no logró hacer gol pero su velocidad puso en evidencia a Bartra, Fue rimando juego el Athletic y coleccionando ocasiones. Iñaki y Rico pegaron un larguero cada uno, y una falta lanzada por Beñat llevó a gol Aduriz pero fue anulado por un fuera de juego inexistente ya que el balón le venía de Bartra. El Betis dejó caer el telón de la primera parte sin tirar ni una vez a puerta. Joaquín se fue ovacionado en el 73’. Es conocido el idilio existente entre la platea del feudo bilbaíno y el carismático jugador del Puerto de Santa María.
Gol de Iker. La gasolina se fue agotando en el depósito de Muniain y la chispa local decaía. Pero Iker sacó fuerzas de flaqueza para abrir la lata, con una internada por la derecha de Lekue, que metió el diablillo rubio ¡de cabeza en el área pequeña! Su tercer tanto de la temporada (ya hizo otro tras la lesión, en Vila-real) y dedicado a su mujer, que espera una cría.
El gol despertó un nuevo partido. El Betis era una bestia adormilada y sacó todo el colmillo a partir de entonces, con ocasiones por todas partes en tiempo récord. Fabián lanzó un zurdazo en el 86’ que destapó una palomita de Kepa. Por fin se movía el meta de Ondarroa. Luego intervino a un disparo con pólvora de Bartra. Y a continuación tomaron el protagonismo Loren y Javi García, en dos saques de esquina desde el mismo lado. En una primera acción se anuló un tanto al Betis por una inexistente falta de Loren a Arrizabalaga y luego peinó el canterano para que Javi enviara a la cruceta. Fue una cháchara que zanjó el Athletic con una carrera plena de fe, a todo pulmón, de Williams hacia un balón imposible; su poderío corriendo al espacio en el descuento es para estudiar. Cedió a Aduriz, que anotó inmutarse.