Abidal debe remodelar el plan diseñado por Robert
Todo son dificultades para poder concretar un medio
Cambiar de secretario técnico en mitad del mercado tiene muchas más cosas negativas que positivas. El trabajo del ejecutivo saliente se queda a medias y el entrante se encuentra con operaciones a medio cerrar. Total, que al final se acaba consumando la herencia como trabajo propio, que es lo que le está sucediendo a Eric Abidal y su adjunto, Ramon Planes, con la planificación hecha durante toda la temporada pasada por Robert Fernández y su equipo.
Es cierto que entre Robert y Abidal hay un punto de conexión; Pep Segura, mánager general deportivo. Y con éste se ideó buscar un central (Clément Lenglet), un medio (Arthur Melo) y rastrear el mercado de jóvenes valores. Los nombres de De Jong o Rabiot siempre fueron muy considerados, tanto que Robert tuvo muy avanzado un acuerdo verbal con el holandés de Ajax.
Pero pasan las semanas y tras la venta de Paulinho Bezerra al Guangzhou Evergrande, a la actual dirección deportiva se le abrió un problema: recuperar potencia para la zona ancha. Tanto el Ajax, por De Jong, el PSG, por Rabiot, y el Chelsea, por Willian, siempre dieron la misma respuesta ante el interés del Barcelona por sus jugadores: “No se vende”.
Queda mucho mercado por delante, eso es cierto, aunque en el Camp Nou comienzan a tener la certeza de que atar un objetivo no será nada sencillo. Con todo esto, Abidal y Planes saben que deben apurar muy bien todas las opciones. Tratan de ponerle hermetismo a sus movimentos para no entorpecer y, evidentemente, encarecer las negociaciones. Por esa misma razón, Abidal y Planes deberán remodelar el plan para este verano en materia de nombres y con su conocimiento de mercado encontrar el futbolista perfecto que necesita el equipo. No hay que descartar que algunos de los tocados acabe en el Barça, pero tampoco hay que obviar que exista algún tapado.
Deseados Está siendo complicado negociar por De Jong, Rabiot y Willian