En busca de la visibilidad desde el Ayuntamiento, la pasarela o los móviles

Visibilidad. Existen más de 700 emoticonos diferentes para el móvil, con deportistas hombres y mujeres, de diferente color de piel... De ahí que Liberty haya promovido una iniciativa, los #PARAEMOJIS, para que los deportistas con discapacidad también estén representados y alcanzar así un lenguaje universal inclusivo. Ya se han recogido 3.887 firmas en change.org y respaldan este movimiento figuras como David Casinos, Jon Santacana, Ricardo Ten, Astrid Fina, Loida Zabala, Jairo Ruiz, Daniel Caverzaschi, José Manuel Ruiz, Héctor Cabrera... Y un largo etcétera al que se suma la secretaria de Estado para el Deporte, María

José Rienda.

Diversidad. Cada vez hay más marcas que apuestan por modelos con discapacidad para mostrar una sociedad diversa. Algunas de ellas han contado con deportistas paralímpicas. La nadadora Anna Ortiz se convirtió en imagen de la firma de zapatos valenciana ‘Irreverente Rosalía’ y los llevó a la Madrid Fashion Week, aunque no desfiló. Una experiencia que sí realizaron los atletas Alberto Ávila y Sara Andrés. Se subieron a la pasarela de la mano de la firma ‘Existence Research Program’ en la EGO de Cibeles.

Igualdad. La estadounidense Brenna Huckaby se colgó dos oros (snowboard cross y banked slalom) en los Juegos de Pyeongchang, aunque semanas antes ya había hecho historia. Se convirtió en la primera deportista paralímpica que aparecía en la portada de la revista Sports Illustrated. Se fotografió con su prótesis en la pierna derecha. “Es raro ver a una mujer con discapacidad posando en bañador. Quiero ayudar a cambiar ese estigma”, dijo a la publicación.

Particularidad. Sports Illustrated se fijó años antes en Aimee Mullins, atleta paralímpica que participó en Atlanta 96, a la que calificó ‘la chica más cool del deporte’. Fue la analista de inteligencia más joven del Pentágono, desfiló para Alexander McQueen y se convirtió en imagen de L’Oreal. Convirtió su diferencia en algo que la hizo única.

Responsabilidad. Única es también Lucía Soria. Juega de alero en el Casa Murcia Getafe, un equipo compuesto mayoritariamente por hombres, y esta última temporada ha sido reconocida como la mejor jugadora española de la liga de baloncesto en silla de ruedas. Además, estudia Veterinaria y trabaja de interna en el hospital Clínico Veterinario de la Universidad Complutense, en neurología. No es lo único... ¡Es la alcaldesa de su pueblo, Fuentelcésped, desde 2015! Una localidad de 250 habitantes. Internet es su gran aliado en el día a día, pero viaja a Burgos cada vez que se celebra un pleno.