En busca del coliderato el viernes
Tenía claro desde que empezó la Liga que el Real Valladolid iba a sufrir. Aún lo pienso. La temporada es larguísima. Pero jamás pensé que el sufrimiento sería para ganar en campos como el del Villarreal o el del Betis, sino por conseguir la permanencia. No es una pelea del Pucela, pero gusta derrotar a equipos que multiplican varias veces el presupuesto de los de Sergio. Con demasiado despeje sin sentido, defendiendo muchas veces por acumulación en la segunda parte, pero la ilusión de este grupo es tal que donde no llega el talento futbolístico, comparado con otros, llega la fuerza y la fe del grupo. Impresionate.
Camina esta plantilla capitaneada por Sergio González hacia un récord absoluto. Ayer sumó cuatro victorias consecutivas, hecho que, en Primera División, sólo consiguió dos veces, pero es que el viernes puede igualar una cifra que no se alcanza desde la temporada 195051. No sólo eso. Se ha puesto tan loca esta liga, que los pucelanos se enfrentarán al Espanyol el viernes, segundos clasificados. El equipo que gane dormirá el viernes líder. En el caso del Pucela sería colíder, junto al Barcelona. En la jornada dos es anecdótico, en la cinco, curioso, pero ponerse en la 10 serviría para pasar a la historia absolutamente. Valladolid, su club, sus aficionados sueñan despiertos. No queremos despertar.