Marc sigue un protocolo individual pero llegará a tope
Se lo ha impuesto los Raptors
Marc es un crack”. Así de rápido y simple lo define el personal de la FEB. Feliz y realizado después de su anillo en Toronto, el pívot de Sant Boi tarda poco en ponerse nuevos objetivos. Primero, dejarse la puerta abierta a marcharse en 2020 a otra franquicia si los Raptors postKawhi no funcionan. Y ahora, la Selección. El menor de los Gasol quiere concederle a Pau el deseo de jugar sus quintos Juegos Olímpicos. De ahí que se tome esta preparación para China con un rigor extremo.
Aunque a alguno le sorprendió que no estuviera en Pamplona para el primer amistoso ante Lituania, el asunto ya estaba planificado y tiene más de una explicación. Para empezar, las franquicias NBA imponen un protocolo con una limitación de entrenamientos y partidos que los jugadores no pueden rebasar. Pero no
sólo eso. Marc llevará de aquí hasta el comienzo del Mundial en Guangzhou el 31 de agosto una preparación más específica que sus compañeros. Para ello, trabaja desde el inicio de la concentración en Madrid con Toni Caparrós, su preparador físico personal, y con Enrique Salinas, fisio de la FEB que estuvo en Unicaja con Sergio Scariolo. Caparrós y Salinas trabajan junto desde hace años por lo que la comunicación es fluida y los resultados, habitualmente, excelentes. Ritmo propio. El objetivo con Marc es sencillo. Entrenamientos de más calidad que cantidad con el fin de que el pívot catalán llegue en buen estado de revista a la primera fase y, especialmente, a tope a la segunda. Con muchísimos kilómetros y experiencias en la mochila, Garbajosa, Scariolo y todo el entorno de la FEB son conscientes de que Marc necesita un ritmo propio.
Personales El objetivo es hacer prácticas de más calidad que cantidad