El paraíso del Racing es el infierno para el Málaga
Unos vuelven a LaLiga, los otros viven en pleno desmadre
Las vueltas que da la vida. El Racing, de sonrojo en sonrojo durante una década, es hoy un remanso de paz, orden y unidad que se mide a un Málaga desnortado que recibe desde Qatar la misma medicina que recetó desde Bahrein Aly Sied al Racing. Que tengan cuidado, que los de El Sardinero aún siguen pagándolo.
Los de Iván Ania llegan al estreno, aún con el límite salarial
más bajo de LaLiga Smartbank, con una buena pretemporada, la base de la pasada campaña y un retoque en su estilo de juego marcado por Luca Zidane, su portero, que se convierte en un jugador de campo más cuando el Racing tiene el balón. Arriesgan, pero hasta ahora ha funcionado y el público, que está enganchado a su equipo, ha dado la bendición al nuevo estilo. Sólo le falta arreglar la delantera. Faltan dos fichajes.
Por su parte el Málaga ha viajado a Santander cargado de incertidumbre por las apreturas a las que les obliga el límite salarial y la caprichosa gestión de su presidente, Abdullah Al Thani. Víctor se ha llevado a 21 futbolistas, De ellos solo están inscritos nueve profesionales y hay 10 filiales. Cifu y Okazaki también forman parte de la expedición en espera de que la Liga autorice su alta. En caso contrario, el técnico debería medir mucho su once para evitar poner sobre el terreno de juego a más de cuatro chavales con ficha del segundo equipo.