Simeone gana uno de cada cinco partidos 1-0
En Liga suma 57 victorias consiguiendo sólo un gol
EI Atlético colidera la tabla clasificatoria con dos victorias en las dos primeras jornadas ligueras. Y tan sólo ha necesitado dos goles para aventajar en tres puntos al Barcelona y dos al Real Madrid. Un tanto de Morata de cabeza tras un fantástico centro de Trippier contra el Getafe y un gol de Vitolo asistido por João Félix ante el Leganés han sido suficientes para que el Atlético haya tenido el mejor arranque liguero desde la temporada 2015-16. Un resultado que se ha convertido en una de las esencias del cholismo. Con Simeone en el banquillo ya son 57 victorias conseguidas en Liga con tan sólo un gol anotado. En un total de 290 encuentros, el dato es de prácticamente un 20% de sus partidos en la competición, uno de cada cinco partidos disputados. El primer perseguidor con ese resultado desde la llegada del técnico es el Athletic con 34 triunfos así.
Un arte basado en una defensa prácticamente infranqueable, con un Oblak que ha dejado la portería a cero en
119 partidos de los 210 que ha jugado en Liga. El esloveno ya ha ganado cuatro trofeos Zamora y Courtois, su antecesor en el puesto, obtuvo otros dos. Con el Cholo, conseguir abrir el marcador es prácticamente oro, aunque eso no quiere decir que el Atlético no sepa golear, ya que promedia 88,8 tantos por temporada con el técnico argentino.
Si los datos se extrapolan al resto de competiciones, los porcentajes se mantienen. En total, el Atlético de Simeone ha ganado 78 partidos por 1-0 o 0-1 de los 431 encuentros que dirigió el Cholo. Un resultado que demuestra que el Atleti sabe sufrir como nadie.
João Félix triplica nuestro presupuesto”. Pellegrino hizo esta reflexión en la previa del Leganés-Atleti. Una obviedad económica la que apuntó el entrenador del Leganés. Pero parece que Simeone captó regular el mensaje porque, a su manera y seguro que sin querer, ayudó a Pellegrino a neutralizar al proyecto de megacrack del Atleti. Porque el carrusel de cambios de sistemas que realizó el entrenador del Atlético durante el partido es digno de análisis y lo más normal es que muchos de sus jugadores acabaran mareados con tanta modificación táctica.
Empezó el Atleti con un sorprendente 1-53-2, con Savic, Giménez y Hermoso de centrales y Trippier y Saúl de carrileros. Así jugó durante media hora, hasta que cambió al 1-4– 4-2 poniendo a Saúl en el doble pivote junto a Thomas y a Lemar en la izquierda. En la segunda parte volvió al 1-5-32, un sistema que, por lo que se vio, necesita mucho más trabajo táctico porque hubo demasiadas desconexiones y pérdidas infantiles que requieren más trabajo. En el minuto 60 dio entrada a Vitolo por Hermoso (fue de los que se vio más descentrado con tanto cambio táctico) y modificó el dibujo de nuevo al 1-4-4-2, poniendo a Vitolo de segunda punta y João Félix en banda derecha. Alejar del área y poner en banda al portugués es quitarle un problema a los defensas y asi anulas a tu estrella sacándole de su zona de influencia. En el minuto 70 cuando entró Marcos Llorente (¡otra vez suplente!) por Thomas. En esas llegó el gol de Vitolo (¿por qué no es titular el canario?) tras una gran jugada de João Félix (¡no le alejen del
área, por favor!). Y nuevo cambio táctico de Diego Pablo: dispuso un 1-4-3-3 en fase ofensiva, con João y Vitolo en las bandas, y un 1-4-1-4-1 en fase defensiva.
Cada modificación del sistema supone un baile sobre todo para Koke y Saúl. Koke por dentro, luego Koke por fuera; Saúl de carrilero, Saúl de medio centro, Saúl de lateral; Lemar de interior, Lemar de carrilero, Lemar en banda y Lemar de interior otra vez. El arriba firmante no tenía tiempo de apuntar tanto cambio de sistema. En el minuto 80 se comentaba en la grada de Butarque que el Atlético se iba a encerrar a defender el 0-1. Y así fue. El equipo se fue metiendo en su área. Y en los últimos minutos, Simeone dio entrada a Felipe por Lemar y el Atleti acabó con un 1-5-4-1 y colgado de su larguero.
Realmente todas sus modificaciones tácticas son defensivas. Si el análisis es sólo sobre los resultados (1-0 y 0-1, 6 puntos en dos jornadas) no habría nada que analizar, pero la realidad es que tal cambalache táctico debe crear una gran confusión en muchos de los jugadores con Mario Hermoso de ejemplo. El central todavía debe estar pensando que tenía que hacer cuando estaba en el 1-5-3-2 si atacar por banda, si lanzar balones cruzados, si buscar a Morata, si jugar por dentro. Hermoso fue el primero que sintió el mareo propiciado por su entrenador ya que el central no sabía si lanzarla en largo o en corto. Hasta el propio Simeone también parece que acabó el partido con una empanada mental, según reconoció a la reportera Isabel Forner en la entrevista flash postpartido en Movistar+.
El Cholo no fue capaz o no quiso analizar todos los cambios tácticos que había hecho y no contestó a las preguntas sobre ese asunto diciendo que había pasado muy poco tiempo desde la conclusión del partido. El Cholo maneja su equipo a su antojo y así le saca rendimiento. Echándole atrás ha sacado los primeros seis puntos en juego. Y así puede ganar LaLiga. Lo que no puede, mejor dicho, no debe, es cansar a João Felix cambiándole de sitio y alejándole del área. Y debería tener cuidado para no marear a sus jugadores y a los analistas. Porque lo de Butarque fue un carrusel tal de cambios que fue la antología de la confusión de jugadores, de sistemas, de dinero, de pepineros...
Resultado En 78 de los 431 encuentros del Cholo se impuso con un único gol