Dos décimas en peligro
El propulsor Renault del McLaren es de los que más perderá si la FIA prohíbe los mapas de clasificación
Lewis Hamilton bautizó como ‘modo fiesta’ al mapa de motor que entrega la potencia máxima durante un par de vueltas, en las clasificaciones, con el fin de extraer hasta la última gota de prestaciones. Es, probablemente, el clímax técnico de un Fórmula 1 moderno. Pero la FIA lleva años acotando el funcionamiento porque los constructores han sorteado toda clase de vacíos legales. Ahora los árbitros plantean suprimir los modos especiales de clasificación, muy probablemente a partir del GP de Italia. Spa-Francorchamps puede presenciar las últimas vueltas a pleno rendimiento de los coches más rápidos de siempre en el Mundial. Y, sin duda, se hablará de ello en el paddock.
Entre las causas de la más que probable prohibición se destacan dos razonamientos: que los comisarios tienen menos recursos que los equipos, y no siempre pueden garantizar la legalidad de los procedimientos utilizados, y que la variedad de modos interfiere directamente en la competición y se convierte en una ayuda para el piloto. La cámara ‘onboard’ de Lando Norris remontando hasta el podio en el GP de Austria refleja la compenetración máxima entre ingeniero y piloto, designando en cada momento el mapa a utilizar o los segundos que debía pulsar el ‘botón de adelantamiento’, pero también se aprecia cierta alienación por parte del piloto, que debería poder tomar sus propias decisiones.
¿Cómo afectará a los monoplazas? Según ha podido saber AS, el motor Renault que emplean tanto el equipo oficial como McLaren, con
Carlos Sainz, brinda unas dos décimas extra gracias a esas vueltas de ‘modo fiesta’, que son un máximo de dos o tres por fin de semana. No se puede emplear en más ocasiones porque comprometería la fiabilidad. El fabricante francés es el que tiene más que perder, porque Ferrari dijo adiós a su extraordinario empuje en clasificación después de la investigación de la FIA y Honda nunca ha destacado en esta faceta.
En el caso de Mercedes, lo que se interpreta como una medida para limitar su enorme ventaja puede tener consecuencias contrarias: desde el garaje amenazan con que si evitan esas vueltas del ‘modo fiesta’ (sólo lo utilizan en Q3), tendrán más prestaciones para gastar en carrera. Y es que la FIA no quiere prohibir los modos de motor, sino la diferenciación entre los que se utilizan el sábado y el domingo.
Calendario La medida se implantará a partir del GP de Italia en Monza