El Barça sale reforzado del ‘tour de la esperanza’
La Supercopa, la única sombra
El Barça ha jugado ocho partidos fuera del Camp Nou en enero y, quitando los dos de sede neutral, los de la Supercopa, los ha ganado todos: Huesca (0-1), Bilbao (2-3), Granada (0-4) y Elche (0-2). Esos, en LaLiga. Y en la Copa, ha ganado en Cornellà (0-2) y en Vallecas (1-2). En este tour de la esperanza, el Barça ha recuperado cierta autoestima. Llevaba dos años arrastrándose fuera del Camp Nou, cinco años sin ganar cinco partidos seguidos de Liga lejos de su campo; y dando la sensación de estar abandonado a su suerte, en un declive paulatino e imparable. Con más o menos acierto, el Barça ha jugado con la mejor actitud que puede tener un visitante los seis partidos de enero, al que se le puede añadir el último que jugó en el año 2020 contra el Valladolid (0-3 con conexión Messi-Pedri). Ronald Koeman sólo ha lamentado de verdad el último minuto de la final de la Supercopa. Revisado el vídeo, comprobó que el Barça jugó bien los minutos posteriores al 2-1. Tuvo posesión y perdonó el 3-1 en una transición final entre Messi y De Jong, pero le dio la oportunidad al Athletic de tirar una última falta.
Un nuevo aprendizaje para un equipo joven que, en este tour de partidos lejos de Barcelona, ha pagado alguna novatada pero ha descubierto una columna vertebral de futuro: Ter Stegen, Araújo, De Jong y Pedri. Ha recuperado unas buenas versiones de Alba, Busquets y Griezmann y hasta ha tenido tiempo de ilusionarse con Dembélé. El Barça, en fin, se ha vuelto a reconocer como un equipo y, con más o menos brillantez, ha salvado un enero peliagudo con un diez de actitud. Sigue lejos de los títulos, pero vivo en todo.
Racha Suma cinco victorias consecutivas lejos de casa después de un lustro