“Me quedan muchos años, me siento igual, es todo mental” Mireia Belmonte

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¿Cómo valora la gran carrera que le llevó a esta medalla de plata?

—Arriesgué en mariposa y en espalda, pero luego me costó. Sabía que el crol era mi fuerte. Veía a Hosszu y a la japonesa, y a nadie más. Acabé a tope y eso te garantiza ganar a alguien de al lado.

—¿Vio a Hosszu más cerca que en otras pruebas?

—La vi más cerca que en cualquier carrera de este año. Subí décimas de mi mejor marca, pero acabé bien el campeonato, nadé un buen 400 y terminé mejor de lo que empecé. Creo que hice un buen campeonato y ahora a pensar en la Copa del Mundo de Moscú.

—¿Budapest superó lo que tenía previsto?

—Superó las expectativas. Lograr un oro lo veía inalcanzable. Cuando en mariposa me metí tercera y me noté rara, no lo veía claro. Fue especial también el 1.500 junto a Ledecky y la última plata.

—Con estas tres medallas, ¿es la más completa del mundo? —No sé si soy la más completa, pero una de las más versátiles, seguro que sí. Es mejor para mí, siempre prefiero centrarme en muchas pruebas y no en una. Es más duro a la hora de entrenar, pero es más ameno poder nadar todos los estilos.

—Y eso que su programa era extenso...

—Siempre que arriesgas a veces se gana y otras no. Fue una competición bastante dura, me inscribí en seis pruebas pero gané tres medallas. Si me inscribo a tres pruebas, a lo mejor no consigo llevarme ninguna.

—¿Cree que deberá cambiar su programa la próxima temporada?

—Voy año a año. Me sale bien por ahora y no tengo porque cambiarlo. Quizás en un futuro me puedo especializar en mariposa o en 1.500 pero por ahora no lo veo.

—Dijo hace un año que seguía en la flor de la vida. ¿Se siente igual?

—Me quedan muchos años, me siento igual, al final todo es mental.