Podio sin besos y con asistentes masculinos
Nuevo protocolo en los premios
El debate abierto esta temporada sobre el papel de las azafatas en los podios de las carreras ciclistas (que se ha extendido a otros deportes) también ha llegado a esta Vuelta. La ronda española ha acordado cambiar el protocolo de la ceremonia de entrega de premios al final de cada etapa. El director de la carrera, Javier Guillén, nunca se ha planteado suprimir su figura, como ya ocurrió este año en carreras como el Tour Down Under o la Challenge de Mallorca... sino que su intención era potenciar sus funciones como asistentes de protocolo, y no su imagen.
Finalmente, las azafatas continuarán subiendo al podio, aunque a las cuatro que había otros años se une un asistente masculino. Los cinco serán los encargados de facilitar el premio o maillot al político, patrocinador... para que este se lo entregue a los ciclistas.
La imagen que sí se suprimirá será la tradicional fotografía de las azafatas besando a los ciclistas, que en esta edición se evitará. En el nuevo protocolo establecido por la carrera, las asistentes no besarán a los deportistas. Aunque también se velará por que no ocurran momentos incómodos o confusiones si uno de los ciclistas sigue el antiguo protocolo. El objetivo es que todo se lleve con naturalidad y espontaneidad.