“Con Dovi he aprendido a no subestimar a nadie”
Marc Márquez, campeón de MotoGP, dice que cualquier piloto puede sorprender como el italiano de Ducati o el francés Zarco, y habla emocionado de su campamento en Rufea
Para Marc Márquez y su hermano Álex, el circuito de Rufea es algo especial. Allí entrenan motocross con Jose Luis Martínez y está su cuartel de invierno. Estos días se está llevando a cabo la tercera edición del Allianz Júnior Motor Camp dirigido a veinte niños de cinco países, con edades de 10 a 13 años, elegidos por el propio campeón de MotoGP entre más de doscientas solicitudes.
—¿Cómo nació la idea del Allianz Júnior Motor Camp?
—De pequeño no tuve la oportunidad de aprender junto a mis ídolos, así que pensé que si hubiese podido estar rodeado de la gente de las motos habría sido algo grande. Quise que los niños pudiesen tener esa ilusión y oportunidad y Allianz me ayudó a dar el paso decisivo. Estos niños me hacen revivir la ilusión que yo tenía y me veo reflejado en ellos ya que aún me considero un niño.
—¿Por qué un campus de motocross?
—Es uno de mis métodos de entrenamiento. Tiene sus riesgos, pero procuro hacerlo lo más seguro posible. Enseñamos a los niños a hacer las cosas bien dentro y fuera de la pista.
—¿Qué diferencia un piloto de MX y uno de velocidad?
—Un piloto de motocross puede ir rápido en velocidad y es difícil que un piloto de velocidad vaya rápido en motocross.
—¿Qué valora especialmente del campus?
—Ese punto de inocencia que tienen los niños. Te preguntan las cosas como las sienten: ‘¿Cómo haces eso del codo?’, ‘¿Por qué te caes tanto?’, ‘¿Es complicado aguantar a los de la Prensa?’. Intento responder con conceptos sencillos y en cuanto al tema de la Prensa les digo que fuera de los circuitos hay cosas que también tienes que saber gestionar. —¿Acompañan los resultados de los pilotos del campus? —En principio se trata de formar pilotos y personas. Eso sí, tenemos ya un campeón del mundo de 85cc, el inglés Eddy Jay Wade, de 13 años. Estuvo aquí el año pasado y le vi en la gala de la FIM. Me hizo ilusión hacerme una foto con él.
—Cambio de tercio, ¿cómo ve MotoGP en 2018? —Será muy difícil después de que este año he aprendido que no se puede subestimar a nadie. Todos te pueden sorprender en cualquier momento, como lo han hecho Andrea Dovizioso y también Johann Zarco.
—Para los test todavía faltan un par de meses. Ahora tocará descansar, ¿no? —Pronto. He estado dos o tres días en casa. El jueves me voy a Japón, vuelvo el lunes y luego tengo algún que otro evento de promoción. No correré el Superprestigio, aunque me encanta, pero quiero descansar en casa al menos dos semanas. —Por último, ¿qué opina de los otros dos campeones de 2017 que suben de categoría? —Mir o Morbidelli, e incluso mi hermano Álex (campeón de Moto3 en 2014) llegan con talento y ambición, pero para los nuevos es complicado porque la nueva categoría requiere adaptarse a ella.
Reflejado “Estos niños me hacen revivir la ilusión que yo tenía de pequeño”