El goleador Gabriel es duda por unas molestias
Ayer saltó al campo para probarse; todo se decide hoy
Al principio el mayor problema era nombrarlo. ¿Gabriel? ¿Gabriel Appelt? ¿Gabriel Pires? Un lío. Normal. Nadie lo conocía. Tampoco él sabía qué era eso de Leganés. Desde Italia lo buscó en Google. Lo ha contado cientos de veces. Casi tantos como búsquedas generó su nombre en febrero de 2011. Aquella fecha le cambió. En el Resende marcó a Ronaldinho pocas semanas después del regreso a Brasil del Gaucho.
Aquel crío secó al crack y saltó a la fama. La Juve se fijó en él. Cinco meses después lo fichó. En Italia dio tumbos por la Serie B hasta que el Leganés lo contrató en 2016, aún en Segunda. Desde que llegó a Butarque, Garitano lo ha usado de forma incondicional. El Lega, en las últimas tres temporadas, han sido Gabriel y diez más.
Molestias musculares le hacen ser duda. Gumbau apunta a su recambio. En el entreno a puerta cerrada de ayer saltó apenas dos minutos. Y gracias. “Con cualquier otro jugador diría que es baja para este partido y dos más. Pero Gabri es especial. Tiene mucha resistencia al dolor”, regateó ayer Garitano sobre la presencia de su máximo goleador. Con cuatro dianas, nadie en el Lega lleva más goles que este medio de 24 años. Le falta uno sólo para igualar los cinco de la 16-17. Es sólo una muestra más de una evolución sorprendente.
Porque Gabriel hace tiempo que no juega cerca del área. Tras reconvertirlo a mediapunta, Garitano lo ha devuelto al mediocentro. Desde ahí, su fútbol ha evolucionado. Sabedor del riesgo, sus filigranas se han reducido y la eficacia de su juego, se ha disparado, especialmente en defensa. De toda Primera es el futbolista que más entradas ha ganado (44) y el segundo que más balones aéreos se ha llevado (69, sólo a uno de Borges). Un pilar intocable sin el que hoy el Lega teme tambalearse ante el gigante blanco.
Gambau Apunta a que será su sustituto en la media si no se recupera