El Madrid y Tavares devuelven el golpe
Los pívots blancos hicieron 46 puntos ● El Valencia, a cinco triunfos
El Madrid y el Valencia se han cruzado dos veces en cinco días. Reparto de triunfos. Cada uno se llevó el gato al agua en el duelo que menos quería. Los blancos llegaban exigidos el martes en la Euroliga, pero venció su rival, ya eliminado. El equipo taronja se jugaba ayer la segunda plaza liguera y dominó el Real, líder con cuatro triunfos de ventaja, que son cinco sobre los de Vidorreta más el average. Un mundo.
Mandó un infranqueable Tavares en la partida de ajedrez entre los interiores. La torre blanca destrozó a los peones naranjas. Hizo daño de salida pero fue en el tercer cuarto en el que comandó la andanada local. El Madrid lanzó mal de tres (4 de 24), pero ajustó la defensa en el tercer cuarto y dejó al campeón en 4 de 14 en la segunda parte (8 de 19 en la primera). Campazzo, Causeur, Doncic, Randolph y Tavares obraron la transformación. Su movilidad y atención atrás cambió el escenario. Tablero nuevo.
Sin el recurso del triple, el Valencia se diluyó por completo. Un hielo en agua hirviendo, consumido por un parcial de 27-9. Los visitantes pasaron de firmar 45 tantos al descanso a añadir apenas 26. Los pívots de Laso agruparon 46 de los 83 puntos por 33 de sus oponentes y el Valencia realizó ocho tiros más de tres (33) que de dos (25).
De salida ambos practicaban el mismo deporte, aunque lo enfocaban diferente. Mientras el Madrid hacía daño con Tavares en la pintura (9 puntos y 13 de valoración en 10:35), y también con un destacado Randolph, el Valencia se parapetaba en la línea de tres. Circulación de balón, interiores abiertos para sacar a Tavares de la zona y tiro al plato constante. Sus cincos, Dubljevic y Pleiss, llevaban cuatro triples al descanso. Su rival era más de arreones, de meter alguna mano y forzar pérdidas, de algún rebote de ataque, ahora Yusta, luego Reyes… Pero también de despistes: 9 posesiones extraviadas. Y sin artillería carecía del sostén necesario: 1 de 12 desde la línea de 6,75.
Taylor, lesión. No llegó el apoyo aéreo en la reanudación, aunque sí la defensa, la intimidación móvil de Tavares y el juego de pase (10 asistencias entonces), el de las buenas lecturas y las penetraciones. Campazzo encadenó seis de sus ocho puntos en el despegue definitivo, a Doncic se le vio activo atrás y Taylor no jugó por un pinchazo muscular. Hay líder sólido, pero el playoff promete.