Fabri quiere resurgir justo ante su querido Granada
Doce jornadas sin triunfo aún. Primera salida para Morilla
No parece un partido parejo este Lorca-Granada. A estas alturas de competición, y faltando diez jornadas aún, los números dicen que los blanquiazules ya no llegarían (ni ganándolo todo) a los 50 puntos en los que cada año se marca el mínimo de la permanencia. Difícil panorama, pero a la que ya están acostumbrados unos jugadores que no celebran una victoria en su campo desde hace cinco meses. Ni con el cambio de entrenador, y es que Fabri acumula nueve derrotas y tres empates. Motivación bien distinta la que tienen los del Granada. Pese al extraño giro en la dirección, con el despido de Oltra pese a estar peleando el ascenso, con Morilla se abre una nueva etapa y la de Lorca será la primera salida que afronte un teórico interino dispuesto a hacer grandes cosas y devolver al fútbol nazarí a la élite.
Donde lo llevó hace casi una década un Fabri González que recupera, en la lucha por su primera victoria como blanquiazul, al habilidoso Noguera. También a Aly Mallé, aunque no a Digard, que continúa con su peculiar brega con las lesiones. Esa que le impide gozar de regularidad. Más dificultades para un Lorca que, si compara su plantilla con la del rival, se encontrará con que cuando el oponente tiene a un goleador consumado como Joselu, los de la Ciudad del Sol se aferran a la joven promesa que es Manu Apeh, que hace un año apenas tenía minutos en Segunda B. C’est la vie.
Arropados. El Granada, para romper su mala racha a domicilio, se trae de la capital andaluza a medio millar de aficionados que empujarán de lo lindo para que los nazaríes sigan peleando por el objetivo del ascenso directo. Víctor Díaz y Sergio Peña serían las novedades en el once de Pedro Morilla.