Tapia de Casariego, un paraíso en el Cantábrico y un 2-0 al Oviedo del Lobo

Puerto pesquero. Tapia de Casariego es un coqueto pueblo pesquero ubicado en la costa occidental de Asturias, muy cerca de Galicia. Bañado por el Mar Cantábrico, posee un paisajístico puerto pesquero que, debido a los recortes de cupos y caladeros, tiene ahora mismo un total de 13 barcos, un número que a los madridistas del pueblo les evoca los maravillosos recuerdos de Kiev y de las conquistas inagotables de su equipo en Europa. Algunos de esos 13 barcos se dedican a la pesca de bajura (pulpo, percebe y pixín) y otros a la de altura (mero y merluza). Las fiestas anuales, dedicadas a la virgen de Nuestra Señora del Carmen, patrona de los marineros, ofrecen el 16 de julio un espectáculo único. Los marineros portan la imagen de la virgen entre unas magníficas alfombras florales mientras las sirenas de los barcos montan un concierto único. Y no se pierdan en la Semana Santa el Campeonato Internacional de Surf, que existe desde 1971 y que está dedicado al australiano Peter Gulley por ser el que trajo el surf hasta aquí. También Tapia de Casariego presume de Gonzalo Méndez de Cancio, un tapiego que en el siglo XVII introdujo en Europa por primera vez el cultivo del maíz al traer semillas desde las Indias. Un pionero.

Peña ‘La Terraza’. El madridismo en Tapia de Casariego, un concejo con 3.850 habitantes censados, ha crecido mucho en los últimos años. La peña nació el 14 de noviembre de 2011, unos meses antes de esa Liga de los Récords conquistada con Cristiano y Mourinho (100 puntos, 121 goles). “Desde que arrancamos hace siete años, casi todos los veranos celebramos alegrías como aquella Liga, pero lo mejor vino después con las cuatros Champions casi seguidas”, nos dice orgulloso el presidente de la peña, Luis Zapatero ‘Zapa’. Pero los merengues tapiegos también tienen un cariño especial por su equipo de fútbol local, que guarda como oro en paño en sus archivos una victoria que jamás olvidarán al ser la víctima un culé ilustre. Fue el 11 de mayo de 2008. Partido de la jornada 37 de Tercera División en el campo de A Xungueira. El Real Oviedo, entrenado por el Lobo Carrasco, llegaba con la vitola de acumular once partidos sin conocer la derrota. Pero se encontró a un Real Tapia lanzado que ganó 2-0, con un doblete de Bruno. “Los tapiegos no olvidamos aquella tarde de gloria para el pueblo. Aquí muchos son del Oviedo y por ese lado no había rivalidad, pero es que el técnico era el Lobo Carrasco. Fue como tumbar al Barça”, dice entusiasmado Rodrigo en la sede social de la peña madridista, la sidrería La Terraza, donde sólo se respira madridismo. Buena gente.

En el puerto hay 13 barcos, que evocan a las 13 Champions