Biles: ningún gimnasta lleva tantos oros mundiales
Logró su decimotercer título, uno más que el histórico Vitaly Scherbo
Simone Biles conquistó ayer el título mundial en salto y suma ya trece, un oro más que Vitaly Scherbo, que tenía el récord hasta ahora. Y hoy le falta por competir en dos finales en Doha (Qatar). La estadounidense ha ganado todos los torneos desde su debut en Amberes en 2013.
Con su victoria en la final de salto, el Aspire Dome de Doha asistió a un nuevo récord de Simone Biles... a sus 21 años: si un día antes conseguía su cuarto título mundial en la general individual, más que nadie en la historia de la gimnasia, ayer sumaba el oro número trece entre las cuatro citas que ha disputado, uno más que Vitaly Scherbo.
La ganadora de cuatro oros en los Juegos Olímpicos de Río es ya la gimnasta más exitosa de siempre. Hoy le quedan dos aparatos más, suelo y barra de equilibrios, y en ambas disciplinas parte con la mejor nota. Si por lo menos sube al podio (acumula 18 metales, con otras tres platas y dos bronces) igualará las 20 medallas mundialistas que tiene la rusa Svetlana Khorkina, con quien compartía la marca de ser las únicas que, hasta ahora, habían alcanzado tres títulos en el concurso general. Lo de batir el récord de podios en los Mundiales de gimnasia deberá dejarlo para 2019, en Stuttgart (Alemania), porque Scherbo conserva el tope con 23.
Pero lo más extraordinario de la mejor gimnasta moderna no es que sea la que más oros ha logrado en los Mundiales, sino las condiciones de cómo lo hace: tras los Juegos de Río se tomó más de una temporada sabática, lo que era ya algo excepcional en la gimnasia, porque tenía 19 años. Cuando regresó, con una nueva entrenadora, Laurent Landi, y tras unos meses complicados al verse salpicada por el escándalo sexual del doctor Nassar, que también abusó de ella, Simone reapareció en el Campeonato de Estados Unidos en agosto. Y alzó en Boston un nuevo título con más de 60 puntos, una barbaridad con el nuevo código.
Otro asunto: llegó a Doha convencida de vencer, y a 40 horas de la competición sufrió un cólico por el que fue hospitalizada. “Un cálculo renal no me va a impedir realizar lo que he venido a hacer en Qatar”, comentó a los periodistas de Estados Unidos cuando abandonó el centro médico para conquistar el oro por equipos.
Más aún, en la final del concurso general falló en dos aparatos: no se recuerdan de
De leyenda Superó un cálculo renal y regresó tras un año sabático
ella dos errores en la misma prueba (salto y asimétricas). Y aun así se llevó la medalla de oro (57,491) por casi dos puntos de ventaja sobre la segunda clasificada, la japonesa Mai Murakami (55,798). Desde que debutó en el Mundial de Amberes (2013), Simone Biles no ha perdido la general en ninguna de las competiciones en las que ha participado.
Su éxito lo anula todo, aunque en Bélgica celebran el oro de Nina Derwael en asimétricas (Biles debió conformarse con la plata), y en México el bronce de Alexa Moreno en salto. Hitos para sus países.