Contador y Valverde, en una fiesta del ciclismo
Ayer practicaron béisbol, corrieron con los niños ....
En 2013, ASO, en su intención por expandir el ciclismo y la marca del Tour de Francia, creó el Critérium de Saitama, una prueba no oficial de carácter más festivo que competitivo. Y si se define por algo, es por su éxito de público. Hoy se espera que más de 200.000 aficionados salgan a la calle a ver a los Thomas, Valverde, Nibali... medirse en una cita que tendrá varias modalidades: contrarreloj, sprint, la carrera en sí...
Pero si por algo se distingue es por su afán de acercar las estrellas al público japonés, que hace guardia desde primera hora en la puerta del hotel donde están alojados los corredores a la búsqueda de un autógrafo o un selfie. Y los ciclistas toman parte en actividades populares y tradicionales, haciendo las delicias de los presentes.
Alberto Contador, elegido embajador del Critérium, y Alejandro Valverde, uno de los más aclamados, no fueron menos y desde por la mañana estuvieron en diversos actos. Desde visitar y entregar juguetes en un hospital infantil a participar junto a niños en una carrera con mini bicicletas. Aunque el momento estelar fue cuando ambos, junto a Geraint Thomas y Alexander Kristoff, practicaron béisbol vestidos con la indumentaria clásica (no faltó el detalle de que la de Valverde lucía el arcoíris). Batearon, como buenamente pudieron, bolas autografiadas por ellos junto a estrellas de los equipos locales masculinos y femeninos. Otros, como Nibali o Trentin, se vistieron con el traje tradicional y tocaron tambores de Taiko (percusión nipona). Todos con una sonrisa, contagiados por el entusiasmo de los asistentes. “Son muy respetuosos y muy agradecidos”, se sinceraba Valverde.