19 de mayo
Hacía ya algunos años que se hablaba en nuestro fútbol de copiar la fórmula inglesa del todos contra todos, que ya existía allí desde cuarenta años atrás. Crecía el profesionalismo, los jugadores querían cobrar más y hacían falta más y mejores partidos. Con los campeonatos regionales más la Copa, a la que acudían los mejor clasificados de aquellos, no llegaba. Se trataba de completar los ingresos con amistosos e incluso giras por el extranjero, pero la solución sólo la podía dar una Liga, con un calendario firme y otro título, distinto del de Copa, en juego.
Hubo, eso sí, discusiones sobre cuántos y quiénes debían participar. Los que habían ganado alguna vez la Copa se pusieron de acuerdo en que debían ser ellos y sólo ellos. Eso reduciría el campeonato a seis participantes: Barcelona, Athletic de Bilbao, Real Madrid, Real Sociedad (heredera del Club Ciclista de San Sebastián, como se llamaba cuando ganó la Copa), Real Unión de Irún y Arenas de Guecho. Pero otros querían participar. Tenían también un desarrollo amplio, la misma necesidad de hacer más taquillas y sostenían que con más equipos la cosa saldría mejor. A los primeros se les llamó minimalistas, a los otros, maximalistas. Estos hicieron un grupo fuerte y vindicativo, con tres que habían llegado a ser subcampeones de Copa, Atlético de Madrid, Espanyol, Europa (de Barcelona), más Celta, Iberia (de Zaragoza), Murcia, Racing de Santander, Sevilla, Sporting y Valencia.
La polémica fue larga y dura. A falta de acuerdo, durante el año 28 cada grupo organizó su Liga propia, la maximalista y la minimalista, pero ninguna de las dos llegó a completar el calendario, aunque de aquello salió la idea de hacer una Primera y una Segunda División. Por fin llegó el acuerdo. Los minimalistas accedieron a abrirse a diez participantes, dando entrada al Atlético, el Espanyol y el Europa, más un equipo, primero llamado X, que saldría de una competición entre los restantes aspirantes. La ganó el Racing. Así que aquella primera Liga la jugaron cuatro vascos (Athletic, Real Sociedad,
El Barça debía jugar en Guecho en esa fecha y se retrasó al 30 de junio