Intención
El Valencia tendrá hoy, por primera vez en un lustro, con una nueva grada de animación. Tras los acontecimientos ocurridos el año pasado y con la expulsión de muchos miembros que ocupaban esa grada, el club ha tomado las riendas este verano para iniciar la organización de un nuevo grupo de apoyo en los partidos.
Con casi 1500 abonados en este sector, se considera que el proyecto ha arrancado con buen pie. No obstante, el miedo a cometer errores del pasado está muy presente por lo que a lo largo del primer mes de competición se van a mirar con lupa todos los movimientos de esta grada y, en principio, no se pondrán entrar banderas ni pancartas de ningún tipo. Además desde el club van a esperar a ver cómo funciona la animación antes de comenzar a potenciarla por sus canales institucionales.
La entidad ché no quiere una grada manejada plenamente por ellos y la idea es que los que la ocupen tengan independencia total. Pero antes de dársela se quiere ver si se han superado situaciones negativas como fueron los insultos y las amenazas que tan mala imagen dieron a lo largo del año pasado.
Pese a que con la normativa de la edad (no pueden formar parte de la Grada Joven mayores de 25 años), se expulsó a muchos aficionados que únicamente animaban a su equipo, el club ha logrado desvincularse prácticamente al 100% de la Curva Nord. De hecho, en esa asociación según ha podido saber As quedan alrededor de 290 socios. A lo largo del curso pasado hubo enfrentamientos internos y disputas en pleno partido con el resto de aficionados. Muchos abonados no entendieron por qué en citas tan importantes no animaban.
La entidad desea que la nueva grada joven funcione con libertad total