El Madrid cree que la paciencia le llevará a Neymar
El club blanco se siente en una posición de preferencia con respecto a Barcelona y Juventus
Sabe que el Barcelona tiene muy difícil encontrar la viabilidad económica para cerrar la operación y está en la creencia de que las últimas horas del mercado le colocarán en una posición franca para su contratación.
El caso Neymar ha entrado en unas horas de calma tensa. Después de las dos ofertas del Barcelona rechazadas por el PSG, los tres clubes que pretenden al brasileño (el propio Barça, la Juventus y el Real Madrid), hacen cálculos sobre cuál es el siguiente paso a dar. A estas alturas, el Real Madrid cree tener una posición más cómoda que el Barcelona. Piensan en los despachos del Bernabéu que será la paciencia la que terminará acercándole al crack.
Esa es la estrategia a seguir. Las cartas están sobre la mesa. El que más presión tiene por fichar a Neymar es el Barcelona. Cuentan fuentes de la negociación a este periódico que Messi llama todos los días a Neymar para mantenerle firme en su deseo de volver a jugar en el Camp Nou.
Pero en el seno del Real Madrid existe la certeza de que el Barça no está en disposición de hacer una oferta económica que satisfaga los deseos
del PSG, que pagó la cláusula de rescisión de Neymar (222 millones) hace sólo dos veranos. Por eso quieren dejar madurar la situación. Sólo haría el club un movimiento brusco si el Barça está realmente cerca de fichar al brasileño. Si no, dejaría correr el tiempo hasta las últimas horas del mercado sabiendo que eso favorecería su postura negociadora, ya con el PSG mucho más presionado.
Por si llega ese momento, hay una persona del Madrid, Juni Calafat (brasileño y amigo de la familia Neymar) que está en constante contacto con el padre del futbolista. Neymar quiere ir al Barça, sí, pero antes que eso quiere salir del PSG, y si no deja Francia en dirección al Camp Nou, lo haría camino de Chamartín. En esa encrucijada está el jugador...
Neymar se ha convertido en una partida de póker para el Madrid y los otros pretendientes. Pero el club blanco no se siente presionado porque su contratación no es estratégica. La razón se llama Mbappé. El crack francés es la referencia en la nueva hoja de ruta que se ha marcado el club. Si fichara ahora a Neymar, la viabilidad de la futura contratación de Mbappé se complicaría.
Mbappé tiene contrato en el PSG hasta 2022 y el Madrid estima que el momento de acometer su contratación será el próximo verano. Su objetivo real es que no renueve esta temporada. Eso obligaría al PSG a negociar su venta para evitar quedarse en una situación de inferioridad en el periodo estival de 2021, en el que a Mbappé ya sólo le quedaría un año de contrato (en esa situación salió Hazard del Chelsea a un precio inferior, 100 millones, al de su valor de mercado). Fichar a Neymar ahora, complicaría toda esa estrategia al Madrid. Pero si se pone el brasileño muy a tiro y a unas condiciones razonables, actuaría. Más vale pájaro en mano...
Quedarse o Juve. “Parece que Neymar se quedará en el PSG al 90%”, se atreve a aventurar, con todo, una voz autorizada del Real Madrid. A estas alturas tampoco se puede descartar que en ese 10% restante tenga ventaja la Juventus de Cristiano. La Vecchia Signora también ha negociado estos días con Leonardo, director deportivo del PSG. Tiene una carta muy importante en sus manos, a Dybala, que es el delantero que quiere Tuchel para sustituir a Neymar. Y tiene también un buen reclamo para el jugador, la fiscalidad italiana que le haría pagar sólo 100.000 euros por los 27 millones de euros brutos que ingresa al año en concepto de derechos de imagen. si se lesionase de nuevo antes del 2 de septiembre ya sería imposible colocarle ni en el Madrid ni en el Por eso, si el club blanco se lanza finalmente a por el brasileño, exigirá al PSG la inclusión de una cláusula que le libere del pago de la astronómica ficha del jugador en caso de que su metatarsiano vuelva a crujir...
Calafat Es el hombre que el Madrid tiene en permanente contacto con el jugador
Mbappé Neymar no es hoy por hoy un objetivo estratégico, pero el francés sí