“No se puede nadar, sólo dejan que se practique surf”
Felipe Perrone, que reside a escasos metros de la playa de la Mar Bella de Barcelona, se levantó dispuesto a nadar 52 días después. El internacional español de 34 años, uno de los waterpolistas más reconocidos, se acercó a la playa pero estaba cerrada. Al preguntarle a un policía si podía acceder a practicar su deporte, este le comentó que era imposible.
“Me dijo que no se puede nadar. Se puede hacer surf, windsurf y paddle surf, pero no nadar. Ya han tenido que parar a dos personas. Ellos comentan que se puede acceder al mar por la entrada de la base náutica, pero no por la playa”, relató el hispanobrasileño, que recientemente se ha proclamado de nuevo campeón de Liga con el Atlètic-Barceloneta.
Los deportistas acuáticos de alto rendimiento esperan que el lunes se pueda poder acceder al mar, pues de lo contrario hasta que no abran los centros de alto rendimiento (lunes, 11 de mayo) o los clubes deportivos con piscina (se espera que a partir del 18) no podrán entrenarse en condiciones, y eso implicaría estar más de dos meses sin entrar en contacto con el agua: “Tengo tabla de surf en casa, quizás lo pruebo”, bromeó.
Otros optaron directamente por correr, renunciando a nadar, como Joanllu Pons, que se encuentra en
Sóller (Mallorca), o las integrantes del equipo español de sincronizada Meritxell Mas, Paula Ramírez y Blanca Toledano, confinadas en
Sant Antoni de Calonja (Girona).