Rubiales y Lopetegui echan pelillos a la mar y obvian Rusia 2018
El chat. Julen Lopetegui
es el entrenador que participa en un grupo de WhatsApp en el que los técnicos de
Primera vuelcan sus opiniones sobre distintos asuntos para que el exseleccionador los discuta en la Comisión Delegada de la Federación,
en la que fue incluido por
Ángel Villar. La Comisión Delegada es el órgano que se ocupa de las competencias relativas a la modificación del calendario, de los presupuestos y de los reglamentos y normas de competición. Lopetegui nunca había asistido a las reuniones de la Comisión, pero ha participado por videoconferencia en las dos últimas, que se han celebrado durante la crisis del coronavirus precisamente porque se han tratado temas de competición.
El grupo. La Comisión Delegada de la RFEF la componen 12 miembros en representación de los estamentos de la Asamblea, desde los entrenadores hasta los jugadores. Luis Rubiales es el presidente, y le acompañan los presidentes de las
Territoriales del Principado de Asturias, Cantabria, Cataluña y Castilla León. Málaga, Cádiz, Unión Viera y Zamudio representan a los clubes, Gil Manzano a los árbitros y Piña y Tello a los jugadores profesionales y no profesionales, respectivamente. Por cierto, Queco Piña está en la oposición a Aganzo y Tello en el bando que defiende al presidente de la AFE.
La paz. La Comisión Delegada de la RFEF ha servido para que Luis Rubiales y Julen Lopetegui retomen una relación que se quebró en el Mundial de Rusia, de infausto recuerdo para España. No es que se palpe entre ellos la alegría previa a la ruptura, pero al menos mantienen la cordialidad y se esfuerzan por colaborar en los temas de interés común, como el voto positivo de Lopetegui para las pausas de hidratación en el reinicio de LaLiga. El técnico del Sevilla, también es cierto, se posicionó igualmente a favor de que el criterio para elegir a los equipos que deberían ir a Europa en caso de no poder concluir las 38 jornadas de LaLiga fuera el de la actual clasificación...
La pregunta. ¿Qué presidente que mantiene estrechos vínculos con Moncloa y con el PSOE ha ampliado aún más estos contactos con el hábil envío a un destacado miembro del Gobierno de un presente a rayas que no son los colores de su ciudad de nacimiento sino justamente los de su eterno y gran rival?