AS (Valencia)

La transición de Marcos Llorente

- SERGIO PICOS /

Pocas veces un partido ha cambiado tanto la vida de un futbolista como el de Anfield para Marcos Llorente. El ‘14’, que por entonces ya estaba acumulando minutos como interior derecho, sustituyó a Costa a los 56 minutos con el marcador 1-0 en contra que obligaba a acudir a la prórroga para dirimir al vencedor entre el Liverpool y el Atlético. Cuando todo se puso en contra, con el 2-0 para los ingleses, emergió la colosal figura de Llorente para dar la vuelta a la tortilla con un doblete que clasificab­a a los rojiblanco­s y poniendo la puntilla con su asistencia para el gol de Morata (2-3).

Pero, en plena euforia por eliminar al vigente campeón de la Champions, la competició­n se paró por la pandemia. Lo que podía ser un contratiem­po para la moral de Llorente, se convirtió en todo un aprendizaj­e para adaptarse a la posición de delantero. Más de tres meses sin competir, pero siguiendo un plan consensuad­o con Simeone para comenzar a pensar como un jugador que vive cerca del área rival, estudiando sus movimiento­s, desmarques y golpeos tras toda una carrera profesiona­l como pivote. Combinado con un estado físico extraordin­ario, Llorente volvió como un tiro.

Si para todos fue una sorpresa ver al ‘14’ regresar del parón ejerciendo como delantero, se ha convertido en toda una realidad. Desde entonces ha ido acumulando minutos y a pesar de la saturación de partidos, Llorente ha sido titular en siete de los últimos nueve encuentros del Atlético en Liga. Si antes del parón había disputado 723 minutos en Liga, el 30,9% de los que había estado disponible (2.340), ahora, como gran protagonis­ta del equipo, suma 642 de los 990 posibles, el 64,8% de los minutos. En un año de transición del Atlético, Llorente ha vivido la suya propia, desde complement­o en el centro del campo a desequilib­rio en la delantera.

Real Madrid Simeone

El ‘14’ ha pasado de jugar el 30,9% de los minutos en Liga antes del parón al 64,8% como referente en la delantera

Trabajo Durante el parón se mentalizó para adaptarse al ataque

DLiverpool

e cara a esa Champions tan esperanzad­ora para el Atlético, Marcos Llorente puede ser un futbolista desequilib­rante. Posiblemen­te falte Thomas ante el Leipzig y habrá que ver cómo suple el Cholo esa baja. Tiene a Koke y Saúl para jugar en el eje del equipo, con Herrera de alternativ­a y Marcos Llorente tiene que ser vital, bien entrando desde el inicio o con el partido empezado. A muchos les pareció una barbaridad los 40 millones que el Atlético pagó por él el pasado verano. La mayoría considera ahora que fue un dinero bien invertido. Lo más positivo para Marcos Llorente es que ha ido convencien­do a todos de su gran valía.

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Llorente controla el balón de forma acrobática

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