La maldición europea con el capitán en la grada
Por segundo año seguido, Ramos contempló desde fuera del césped la eliminación del Madrid en la Champions. Esta vez en la grada del Etihad, sin las cámaras enfocándole en su palco del Bernabéu para el documental de Amazon. Aquella aciaga noche del Ajax tampoco fue una experiencia novedosa para el de Camas. En dos más de las otras nueve eliminaciones europeas que ha sufrido de blanco, el central no ha podido ayudar a sus compañeros en el partido decisivo por sanción.
La primera ausencia fue la vuelta de octavos de 2008 contra la Roma. En el 2-1 allí (Pizarro y Mancini remontaron el gol inicial de Raúl) vio la tercera amarilla, por la que tuvo que cumplir sanción en el Bernabéu, donde los giallorossi repitieron resultado (Taddei y Vucinic hicieron vano otro gol de Raúl).
Tres años más tarde, Ramos se perdió el tercero de una tormenta de Clásicos también por acumulación. Vio su tercera amonestación en la ida de las semifinales en el Bernabéu (0-2 con doblete de Messi) y ocho días más tarde no pudo pisar el césped en el Camp Nou (1-1 con tantos de Pedro y Marcelo).
En sus 15 temporadas de madridista, Ramos sólo se ha perdido otros tres partidos de vuelta en eliminatorias de Champions. El de cuartos de 2013 contra el Galatasaray en Estambul (3-2 en Turquía tras el 3-0 del Bernabéu); el de octavos de 2015, este por lesión, frente al Schalke en un encuentro que se le acabó complicando al Madrid (3-4 en Madrid tras el 0-2 de la ida); y en los cuartos de 2018 contra la Juventus en otro final agónico (1-3 con un penalti en el último minuto cuando la eliminatoria se encaminaba a la prórroga tras el 0-3 de la ida).