AS (Valencia)

SEGUNDO EMPATE EN CASA

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El Celta es el segundo equipo que saca algo positivo del Wanda Metropolit­ano. El Villarreal había obtenido también un empate en la quinta jornada. El Atlético, además, únicamente se había dejado puntos ante el Huesca, empate a cero, y frente al Madrid, derrota por 2-0.

El partido casi lo acabó de ganar Kondogbia poco después cuando el centrocamp­ista salvó en última instancia un remate de Aspas. El Atlético hizo lo más complicado y cerró filas cuando el Celta apretó con el balón. El desenlace del encuentro ya sí fue algo habitual en los partidos del Atlético cuando el equipo madrileño tiene el marcador a favor, todos juntos, sin cometer errores y a la espera de sentenciar a la contra. Kondogbia y Torreira fueron un muro en el medio y cada rojiblanco peleó cada balón como si fuera el último de LaLiga. Giménez pudo hacer el tercero, pero fue el Celta el que logró el empate casi en el instante final. Ferreyra marcó y el Celta se llevó un punto.

REPORTAJE GRÁFICO CHEMA DÍAZ Y AGENCIAS

En ese esquema llamó la atención la falta de confianza que evidenciar­on Felipe y Lodi. Los llamados a ser el central y el lateral izquierdo de Brasil no atraviesan su mejor momento. Nada tiene que ver su estado con el que alcanzaron la pasada campaña. Seguro que el Cholo recuperará su mejor versión. Con la salida de Felipe y la entrada de Torreira, Simeone volvió a su clásico 1-4-4-2. Y de repente Lodi se pareció al mejor Lodi al asistir con enorme categoría a Luis Suárez en el segundo gol. Igual que Llorente (¡de carrilero no!) había dado al uruguayo el primero desde la otra banda la única vez que atacó en la primera mitad. Pero con Suárez en el campo da igual el sistema que utilices. El uruguayo es un pistolero del lejano oeste. Y cada vez que desenfunda, mete un balazo entre ceja y ceja a una Liga que al Atleti es difícil que se le escape. El empate final del Celta dejó fríos a los colchonero­s. Pero hay colchón.

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