El atacante quiere estar en la Eurocopa con Francia este verano

Nabil Fekir agarra definitivamente los galones que le entrega Manuel Pellegrini tras un inicio de temporada irregular. El francés destacó en la última cita de los verdiblancos ante el Barcelona y su último mes refleja un rendimiento creciente con miras a la búsqueda de objetivos personales y colectivos. Nadie juega más que él en el equipo bético. Pellegrini le entregó un peso importante en su proyecto y el ex del Lyon responde ahora a la llamada del liderazgo: es junto a Canales la mejor arma para soñar con Europa en la antesala del tramo clave de curso.

Fekir nunca tuvo la intención de esconderse, pero su rol en el dibujo de Pellegrini le da ahora una mayor relevancia en el juego, con un protagonismo importante en la creación en tres cuartos y siendo una baza clave en la presión. Es el jugador que más faltas recibe de toda LaLiga (62), pero también es el segundo que más comete (57), todo un indicio de la intensidad con la que participa en el juego de su equipo. “Fue una vergüenza”, avisó Pellegrini sobre lo acontecido en la cita copera ante el Athletic por las numerosas faltas que recibió el francés. Su plan para el cierre de campaña pasa en buena parte por la versión de juego que Fekir sea capaz de ejecutar sobre el campo. La petición de técnico y club desde hace meses de que diese un salto cualitativo en su rendimiento encuentra ahora la respuesta del jugador, que sin embargo sigue sin ser decisivo a nivel de estadísticas: Sólo un tanto y cinco asistencias.

Fekir llegó hace un año y medio con la etiqueta de convertirse en la pieza más determinante del equipo y su misión

Desafío

en este tramo final de Liga es ejecutar ese rol. Tiene la confianza del técnico y generó una alianza letal sobre el césped junto a Canales. A ello se agarra Pellegrini para soñar con la aún lejana meta europea.

Futuro. Fekir tiene más objetivos sobre la mesa. Estuvo presente en el título mundialista de la selección francesa y quiere convencer a Didier Deschamps de que puede tener un sitio en su plan para la próxima Eurocopa. Un reto que tiene en vilo al Betis y al próximo mercado de verano, en el que volverá a estar en el centro de los focos por su alta cotización y la necesidad del club verdiblanco de encontrar operaciones económicas de altos vuelos en un futuro inminente.