Tras el descanso, el Barça fue mucho más eficaz en defensa

El Barça logró alargar su magnífico momento de forma y resultados con una victoria cómoda ante el Zalgiris y, otra vez, con Higgins protagonista. El escolta norteamericano fue una pesadilla para un rival incapaz no solo de taponarle el tiro, sino de evitar que penetrase con facilidad. El resto del equipo acompañó también. Destacó Oriola, reafirmando el liderato de la Euroliga.

El Barça y el Zalgiris demostraron rápidamente que son los dos equipos con mejor porcentaje de tiro de la competición, en un intercambio de canastas constantes en los primeros minutos. Pudo el Barça aumentar la distancia gracias a Higgins, pero su rival respondió rápido.

No fue hasta el segundo cuarto cuando el equipo catalán abrió una tímida brecha en el marcador (31-26) gracias a los puntos de los hombres de rotación: Kuric, Bolmaro y Davies. Apareció mucho más Mirotic, lo agradeció el Barça, y falló el Zalgiris tiros exteriores. Además, los azulgrana mejoraron en defensa. Un parcial de 10-2 llevó la ventaja a 11 puntos (41-30), que se mantuvo inalterada hasta el descanso (48-37).

Sabía el Barça que no podía permitir al equipo lituano tantos puntos como en el primer cuarto si no quería acabar sufriendo, objetivo que cumplió con creces tras el descanso. Arrancó con un parcial de 7-0 y los cuatro puntos en seis minutos del Zalgiris llegaron desde el tiro libre. En todo ese asalto, el parcial fue de 23-10. El Barça cogió más rebotes, apareció Davies y la renta se fue más allá de los 20 (65-41) con el equipo de Jasikevicius jugando prácticamente a placer.

Los últimos diez minutos arrancaron con un contundente 71-47 en el marcador y seis tantos consecutivos de Oriola. Jasikevicius repartió minutos (entraron Sergi Martínez y Pustovyi) en un partido que se le hizo demasiado largo a los visitantes. Nunca pudieron discutir la victoria: Oriola estuvo estelar y cayeron por 86-62.

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