Godín “Veo al Atlético sólido y fuerte, como cuando ganamos LaLiga en 2014”

Diego Godín (35 años) atendió a AS a través de La Futbolería de Astv. La charla de fútbol con el uruguayo te envuelve. Recorre con la misma intensidad y emoción su gol en Lisboa, su tanto en el Camp Nou que dio una Liga y toda su etapa en el Atlético en la que la clave fue contar con un grupo de amigos que luchaban como hermanos fuera y dentro del césped. Así, con Simeone en el banquillo, ganaron tantos títulos.

—¿Cómo es lo de jugar para evitar el descenso con el Cagliari para uno de los mejores centrales del mundo?

—C u a n d o arranqué en Cerro en Uruguay viví situaciones parecidas, era más chico, era otra mi ingenuidad. Después de tantos años en Europa peleando títulos es más difícil porque vine al Cagliari para intentar dar una mano, la idea era ayudar al Cagliari a pelear puestos de Europa League, dar un paso más adelante, que era lo que pretendía el presidente. Y entramos en esta situación que genera un poco de angustia, un poco de nerviosismo y para mí, que soy de los veteranos del plantel, genera bastante responsabilidad. La responsabilidad la asumo y convivo con ella. Hasta el final serán finales y serán momentos de tensión hasta final del campeonato.

—¿Cómo es Giovanni Simeone de compañero y de delantero?¿Podría triunfar en LaLiga, en el Atlético, en el Sevilla...?

—Gio es un grandísimo chico, muy bueno, un pedazo de pan. Tiene una actitud muy buena, se entrena bien, siempre es positivo, siempre está intentando mejorar, habla con los entrenadores para ver qué puede mejorar, para saber en qué se equivocó. Y tiene una fuerza física que es lo que le da ese plus cerca del área, es un gran rematador. Me decía que en la liga italiana le cuesta más porque tiene que jugar muchas veces de espaldas, las defensas están muy cerradas, son equipos muy tácticos y él con espacios, llegando al área para definir o corriendo al espacio, se siente más cómodo. Tiene condiciones, por supuesto, para poder probar en otra liga como la española, en una liga inglesa. Le veo condiciones y además tiene mucha voluntad. Va a seguir creciendo y haciendo su carrera.

—¿Cómo fue su experiencia en el Inter de Milán?

—Yo pensaba que iba a jugar en la línea de atrás por el medio, que es donde estaba más habituado, y me sentía más cómodo haciendo las coberturas, jugando a la espalda y dirigiendo un poco la defensa. Pero tuve que hacer un gran esfuerzo para cambiar mi mentalidad y mi físico, pero era un esfuerzo tremendo ya con 33 y 34 años. Y lo hice y terminé jugando y haciendo buenas actuaciones. Tengo mensajes de cariño de los hinchas del Inter y eso no puede ser casualidad. Ganarse ese respeto no fue fácil. Yo no seguí por decisión del técnico.

—Acaba de cumplir 35 años, como Sergio Ramos que dice que le queda cuerda hasta los 40. ¿Hasta cuándo le queda cuerda al ‘Faraón’?

—Yo no fijo si me quedan dos,

Mundial 2022.

tres o cuatro años. Voy año a año. Y mi gran objetivo ahora es ayudar al Cagliari a salvarse. Vine por una decisión familiar. Es un grandísimo club, aquí nos aman a los uruguayos y mi gran objetivo a corto plazo lograr la salvación. A medio plazo, es poder jugar la Copa de América, poder ganarla y poder clasificar a Uruguay a otro Mundial, porque en un año se define todo porque se juega la Copa de América, se juega la clasificación del Mundial y ya sabremos si Uruguay va a estar en el Mundial 2022. Como capitán y como líder de mi selección es poder llevar a Uruguay a una cita mundialista más y poder jugar mi cuarto Mundial. Y esto es un año y medio. No es tanto, pero es mucho, porque en el fútbol en año y medio pasan un montón de cosas. Una vez consigamos estos objetivos, seguiremos año a año y vamos viendo cómo sigue mi carrera, pero no me fijo un tope de voy a jugar hasta los 40, hasta los 37… Voy llevándola y ver cómo responde el cuerpo. Y tener las ganas, porque la cabeza manda. —¿Por qué se fue del Atlético?

—No se llegó a un acuerdo para la renovación, así de claro. Eran nueve años, se había cumplido un ciclo y me picó el bichito de vivir otra experiencia. Pero yo con el Atleti no puedo tener malas palabras, con nadie. Lo que tengo son buenos recuerdos, recuerdos de la afición, de mis amigos, de la gente que trabaja en el club, buenos recuerdos de todo y de todos. No se llegó a un acuerdo y fue difícil. En su momento lloré porque es difícil cuando te vas de tu casa, cuando te marchas del lugar donde siempre quisiste estar, del lugar que amas, donde tienes gente que te quiere y que uno quiere. Pero siempre tendré bonitos recuerdos del Atleti.

—¿No pudo apretar más Simeone para que siguiese en el Atleti?

—No lo sé. El Cholo habrá hecho su trabajo. Tampoco puedo depender de lo que haga el Cholo o de lo que no haga. En ese momento no se llegó a un acuerdo y era entre el club y yo. Simeone era el entrenador y públicamente dijo un montón de veces que yo no me podía ir, que era Godín y 20 más. Con el Cholo siempre palabras de agradecimiento.

—Se dijo en su anterior renovación que Simeone llegó a decir que si no renovaban a Godín, él se iba... ¿Fue así?

—Sí, eso fue el verano de 2015. Vino el Manchester City y pagaba más que mi cláusula, porque quería hacerlo en buenos términos. Y yo negociaba con el Atlético y el City estaba apretando, el Cholo se enteró en Japón, porque estaba el equipo de gira por Asia, aunque yo estaba en Madrid porque había vuelto más tarde de la Copa de América. Todos cerraron filas, recuerdo a Gabi, a Raúl García, a Tiago, todos mis compañeros y el Cholo también y dijo: “Si se va Godín, me voy yo”. Eso dijo el Cholo y al otro día estaba renovando. Son gestos que tengo que agradecer. En realidad eso demuestra el grupo que había. Dentro de ese grupo tenía y tengo amigos. El fútbol pasa, pero lo que te quedan son los amigos y la gente que hasta el día de hoy me quiere.

—Ese grupo de jugadores llevó al Atleti a ser el más importante de la historia. Godín, como líder trasladaba toda la filosofía del Cholo. Explique cómo era el funcionamiento de ese vestuario...

—Para tener un equipo con éxito debes tener un buen vestuario. Había un grupo de hombres y un grupo de amigos y el Atlético de Madrid estaba por encima de cualquier individualidad. No había egos. Gabi era el capitán, yo era un capitán sin brazalete, como lo era Raúl García, como lo era Tiago, como lo era Juanfran, como lo era el Guaje Villa cuando llegó. Cada uno tenía su rol y sabía lo que tenía que hacer, pero todos empujábamos para el mismo lado. Nosotros logramos algo que con los años se valorará todavía más como fue ganar una Liga después de 38 jornadas, llegar a una final de Champions y hacerlo en la época del Madrid de Cristiano y el Barça de Messi que dominaron el fútbol durante diez años. Eso lo logramos por la fuerza del grupo, a través de la idea del Cholo, a través de la idea del equipo. Y nos defendíamos a muerte porque éramos como hermanos fuera y se veía dentro del campo como peleamos, —¿Está siguiendo la temporada? ¿va a ser el Atlético campeón de Liga?

—Sí, siempre, veo todos los partidos. El Atlético generó un colchón de puntos importantes. Madrid y Barcelona tuvieron una primera vuelta bastante irregular, con altibajos, y el Atleti fue un equipo sólido y regular. Así y todo, ya han recortado puntos y todos sabemos que el Madrid y el Barça van a estar peleando hasta el final, van a seguir apretando. Al Atleti lo veo bien porque lo veo con variantes y porque tiene gol, cada vez que llega hace daño, con poquitas cosas, ante el

Añoranza “Lloré al irme del Atleti porque es difícil irte de la que es tu casa”

Retorno “Hablamos con Gabi, Juanfran, Filipe... de volver al club”

Confianza “Siempre supe que Suárez estaba hecho para jugar aquí”