‘Guerra Fría’ de fichajes
Madrid y Barcelona dibujan un verano tenso por el interés coincidente en Haaland y Alaba
Neymar protagonizó la última gran batalla entre Barcelona y Real Madrid por un jugador. Fue en 2013. Hasta el último minuto, el brasileño mantuvo el suspense sobre cuál sería su destino. Florentino Pérez, ante las cifras que se manejaban, decidió retirarse de la puja. El tiempo le dio la razón. La operación acabó en los juzgados.
Estos días ambas entidades reviven esa particular Guerra Fría en el mercado. Lo hacen en una situación parecida, con sus finanzas muy tocadas por la caída de los ingresos y con la necesidad de revitalizar plantillas que se atisban desgastadas. En esa particular guerra fría, como antes sucedió con el propio Neymar, Alves o Beckham, ahora hay dos nombres sobre la mesa, los de Haaland y Alaba.
Y otros que pueden llegar a interesar a ambas entidades, como Camavinga o Pogba, éste último, gran outsider del próximo mercado de fichajes.
El caso de Haaland es el más obvio, dado que el padre del jugador y su representante, Mino Raiola, no quisieron esconderse cuando, en una misma jornada, visitaron las instalaciones del Barça, donde les recibió Laporta, y del Real Madrid, donde hizo lo propio José Ángel Sánchez, para trasladar las pretensiones económicas de sueldo que tenía el delantero y las del Borussia para un traspaso. Mino Raiola, un padre deportivo para el futbolista, tiene una gran relación de amistad con Laporta. Por el contrario, no tiene mucha química con Florentino, con el que tuvo un encontronazo cuando ambos negociaban, en 2016, la posible incorporación de Pogba al Madrid desde la Juventus.
Pero el futuro de Haaland no depende de amistades personales. El jugador, consciente de que cualquiera de las ofertas que tiene sobre la mesa va a cubrir lo que pide cobrar al año (en torno a los 12 millones netos), piensa priorizar los proyectos deportivos, la opción que le asegure ganar más títulos a corto plazo y optar a ser Balón de Oro.
Por otro lado, habrá que satisfacer lo que el Borussia quiere para dejar salir al jugador este verano. Si lo hiciera en el de 2022 sí estaría obligado a facilitar su salida a un precio razonable, ese es el pacto al que llegó con Raiola.
Con Alaba la situación es parecida. La relación de Laporta con Pini Zahavi es excelente y ambos se vieron en fechas recientes, pero el deseo de Alaba, como sucede con Haaland, es jugar en el Real Madrid. Ahí la entidad blanca lo tiene más fácil. Sólo espera a ver qué sucede con las renovaciones de Varane y, sobre todo, de Ramos. Al terminar Alaba contrato, no hay que pagar traspaso por el defensa austriaco, que cobraría en torno a los 20 millones brutos (10 netos) al año. La operación es factible para Madrid y Barça. Alaba y Haaland son protagonistas de esta particular Guerra Fría del Clásico.
Barça.
Haaland Quiere asegurarse un proyecto ganador con el que optar a títulos
Alaba Es más factible porque no hay que pagar un traspaso