La acción eléctrica se reanuda en Roma con otro doblete
De Vries lidera la clasificación
Si de competición en circuitos, incluidos los urbanos, hablamos, la Fórmula E fue el primer Mundial en ponerse en marcha a finales de febrero en Arabia Saudí. Ha tenido que pasar casi un mes y medio, en el que también han comenzado a andar la F1, MotoGP y Extreme E, para que se retome la acción este fin de semana. Lo hará regresando a la ciudad eterna, Roma, la que no visitaba desde 2019 y, para celebrarlo, la capital italiana recibe desde hoy al campeonato con otras dos carreras y una gran novedad: su circuito.
Porque está en el mismo lugar, al sur de la capital italiana, alrededor del Palacio de Congresos y del Obelisco de Marconi que es su mayor seña de identidad, pero poco tiene que ver con el trazado en el que se corrió dos temporadas. Para esta, ha sufrido importantes modificaciones que aumentan su distancia a los 3,385 km, que le convierten en el segundo circuito más largo de la historia de la FE tras el de Pekín, y su número de curvas hasta las 19. Apenas comparte el inicio del primer sector y el final del último, aparenta ser bastante más rápido y supondrá un nuevo reto para todos.
Para todos, empezando por el líder, Nick de Vries. El piloto neerlandés de Mercedes fue el que mejor parado salió del doblete inicial en Diriyah, donde sin duda fue el
Nuevo circuito Tiene 3,385 kms, el segundo más largo de la historia de la categoría
más rápido del fin de semana, con pole y victoria en la primera carrera y un noveno puesto más la vuelta rápida en la segunda. Así, llega con siete puntos de ventaja sobre Bird, que ganó la segunda prueba con el Jaguar, y diez sobre el Virgin de Frijns. Son los únicos que sobrepasan los 20 puntos porque Mortara, el cuarto, tiene 18.