Los sueños de Las Palmas y Málaga se unen en la isla
La salvación virtual, antesala del posible playoff
Ni mucho menos pueden dar la temporada por salvada, pues tampoco es que lo permiten las matemáticas, indiscutibles en todo caso. Sin embargo, Las Palmas y Málaga llegan a primavera con los deberes hechos y, a falta de confirmación oficial, serán, salvo hecatombre milagrosa, equipos de Segunda el año que viene. Eso como mínimo, pues parecen empeñados, por mucho que la tozuda realidad no deje de mandarles avisos, en que jugar los playoff no sea una mera ilusión óptica.
Recibe Las Palmas a la formación andaluza con la baja de Jesé, expulsado en Oviedo. La punta de lanza del equipo de Pepe Mel será de Araujo, que pese a llevar siete goles desprende la sensación de que no termina de arrancar. Estará escoltado por Rober y Pejiño, a quien la ausencia de Jesé, con cambio de sistema incluido, le brinda la oportunidad de volver al equipo. Aparecen además las bajas de Kirian y Mujica.
Mientras, del doble pivote hacia atrás nada cambia, salvo sorpresa. Una vez más, todo el juego insular gravitará en torno a Sergio Ruiz.
Idílica. El Málaga se encuentra en una situación idílica para lo que se barruntaba a principios de temporada.
Con el límite salarial más bajo del fútbol profesional (2,964 millones de euros) acumula 48 puntos que le aseguran virtualmente la permanencia. “Hay que ser ambiciosos” es el mensaje de Pellicer. No podrá contar con Escassi. Su puesto lo pueden ocupar Benkhemassa y el filial Alberto Quintana. Solo se han desplazado 14 profesionales.