Hay piernas para un doblete
La victoria en la Copa rearma la moral y el estado físico del equipo de Koeman, que ahora depende de sí mismo para ganar LaLiga
La exhibición del Barça contra el Athletic en La Cartuja no sólo le dio su Copa número 31. También alimentó el sueño del doblete en un vestuario desatado de ambición y con el convencimiento de que, pese a la derrota en Valdebebas contra el Madrid, todavía es capaz de llevarse el título. La Copa no basta.
Es algo más que una cuestión de ánimo. Y algo más que un asunto de sensaciones. Sobre todo, es de juego y de piernas. Porque el mismo Barça que metió en su área al Madrid en los últimos minutos del Clásico fue el Barça que pasó por encima del Athletic en la segunda parte. Los de Koeman iban a otra velocidad. Piqué, Mingueza y Araújo jugaron sobrados en defensa; Dest y Jordi Alba fueron dos martillos pilones en las bandas; Pedri y De Jong están exuberantes y veteranos como Busquets o Messi estuvieron a un nivel altísimo. El equipo ha alcanzado un escalón físico óptimo, la mejor prueba de que Koeman ha recuperado la cultura del esfuerzo.
“A por LaLiga”. Desatado en el vestuario con los jugadores, Laporta les pidió ir a por el doblete el sábado por la noche. Futbolistas que han sufrido tanto en los dos últimos años, y que ahora se ven en esta dinámica de juego, tienen claro que van a ir a por los 24 puntos que están en juego. Al Barça le esperan partidos contra Getafe, Villarreal, Granada, Valencia, Atlético, Levante, Celta y Eibar. Los de Koeman son conscientes de que sólo ganando los 24
De Jong El holandés representa como nadie la mejora física del cuadro culé
puntos tendrán opciones de título. Hay un vestuario hambriento y un entrenador que, en la época del Dream Team, se convirtió en un estupendo perseguidor y supo competir con optimismo hasta la última jornada de aquellas Ligas del 92, 93 y 94. Y sus jugadores quieren. “Esto no ha terminado, esto acaba de empezar”. En la frase de Piqué está el leit-motiv del Barça de aquí a final de temporada.
Dentro de este nuevo paisaje en el que el Barça depende de sí mismo y en el que el equipo se siente fuerte destaca de manera especial la participación de De Jong. Su exhibición física en La Cartuja se completó con un gol y dos asistencias en su regreso al centro del campo gracias a que Piqué reapareció en defensa.