AS (Valladolid)

Ratón se lleva un punto, pero no salva a Luis Milla

El Valladolid tuvo una decena de ocasiones, pero sin acierto

- IGNACIO BAILADOR

EI fútbol puede tener muchos atributos y puede conjuntar la ilusión con la injusticia como se pudo observar ayer en Zorrilla. Álvaro Ratón, 23 años, debutó en la portería del Real Zaragoza e hizo el partido de su vida. Hay encuentros que sirven a los cancerbero­s para aparecer en primera línea y el de ayer fue el del canterano aragonés que con su partidazo, con su conversión en súper, no sólo derribó la puerta de la titularida­d, sino que salvó un punto para su equipo, aunque no la cabeza de su entrenador, Luis Milla, que se resistió a ponerle hasta que los groseros errores de Irureta no le dejaron más remedio y ahora hasta puede que se arrepienta.

El fútbol también puede ser injusto, como lo fue ayer. El Real Valladolid mereció ganar el encuentro con holgura. Creó hasta una decena de ocasiones manifiesta­s de gol, pero de nuevo la persiana de la portería contraria volvió a estar cerrada. Bien por el héroe aragonés o por la falta de acierto de los pucelanos, lo cierto es que los de Herrera no fueron capaces de ganar el partido. Y es que, la primera jugada de peligro del partido podría valer como muestra de lo que sería el resto del encuentro. Balbi disparó desde fuera del área y el balón se estrelló en el palo, el rechazo no pudo embocarlo Juan Villar y cuando remató Míchel, por tercera vez en la jugada, su lanzamient­o fue despejado por Ratón y escupido por el larguero fuera. Dominio total.

Entonces no lo sabían, pero el partido iba a ser eso. Porque los pucelanos jugaron muy bien en la primera parte. Ante el cambio de formación planteado por Milla, que pasó al 4-4-2, los de Herrera tocaron bien en el centro del campo, entraron por las bandas y crearon numerosas ocasiones. De hecho, cuando no llegaba Ratón, era Marcelo Silva el que sacaba bajo palos un lanzamient­o de Jose. Pero no. El protagonis­mo no fue compartido. El salvador de los zaragocist­as ayer fue Ratón. De esta manera, detuvo los intentos de Leao, Míchel, incluso Villar. El onubense cabeceó duro, abajo, a la cepa del poste, pero allí apareció la mano salvadora del cancerbero gallego del Zaragoza cuando ya se cantaba el gol en Zorrilla. Los locales pidieron un penalti de Casado sobre Moyano, que Pulido Santana desestimó, mientras que los aragoneses lo fiaban todo a una contra lanzada por Juan Muñoz o Ángel, el más destacado de los visitantes, que tuvo, precisamen­te, la más clara de los suyos antes del descanso. Becerra salió muy precipitad­o ante un balón dividido y el delantero le regateó, pero su lanzamient­o lo sacó Alex Pérez bajo palos. Llueve sobre mojado con el gran portero catalán. No está mal en los partidos, pero en muchos de ellos hace una salida que hiela la sangre de todo pucelano de bien.

En la segunda parte, el guión fue calcado. El Valladolid buscando el gol y el Zaragoza defendiénd­ose y fiándolo todo a la estrella que tenía Ratón. De esta manera, Míchel lo intentó desde lejos, Jose, de cabeza, desde cerca, y, de nuevo Villar, dentro del área, pero no hubo manera para los intereses blanquivio­letas. Entonces Herrera dinamitó el partido. Metió a Ibán Salvador, un joven guerriller­o que tardó menos de dos minutos en forzar la expulsión de Casado. Se revolviero­n el extremo guineano y el lateral, ayer extremo madrileño, y éste último salió trastabill­ado y mosqueado y cazó a Moyano, que pasaba por allí. La roja de la impotencia era clara. No ayudó eso, sin embargo, al Valladolid a acelerar la marcha, ni a avasallar a su rival, aunque Jordán, inmenso futbolista, y Guitián tuvieron opciones al final, pero ayer Ratón fue Súper.

Sin suerte El Valladolid jugó muy bien y generó, pero se topó con Álvaro Ratón

 ??  ?? OCASIONES. El Real Valladolid consiguió hacer muchas ocasiones, pero Ratón impidió el gol.
OCASIONES. El Real Valladolid consiguió hacer muchas ocasiones, pero Ratón impidió el gol.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain