En busca del once definitivo
Tengo la impresión de que de ahora en adelante veremos menos probaturas, menos experimentos, de los que hemos presenciado hasta ahora en las alineaciones del Valladolid. No seré yo quien le diga a Paco Herrera a los jugadores que tiene que alinear, hasta ahí podíamos llegar, pero sí se le pueden transmitir al técnico las sensaciones que el entorno blanquivioleta tiene en cuanto a lo que parece más rentable y menos efectivo dentro de la selección de futbolistas que en cada partido realiza el técnico. Sorpresas como ver a Mata permanentemente por la izquierda, a Jordán quedarse de repente en el banquillo, a Igor saltar de la grada a la titularidad en Getafe,oa Guitián oa Alex Pérez salir del equipo una semana después de que el Valladolid dejara la portería a cero, otra vez con ellos dos, parece que ya hemos tenido bastantes. Herrera necesita un once más o menos habitual, que la gente se aprenda de carrerilla y en el que entrar y salir no sea tan sencillo o fruto de la lotería de Navidad.
Si hay una pareja de centrales que se ha acoplado mejor y que presenta mejores números, debe tener continuidad. Si Mata juega mejor de delantero, pues tendrá que jugar de delantero, cuando tenga que jugar. Si De Tomás empieza a demostrar que a su innegable calidad le añade efectividad de cara al gol, tendrá que jugar más. El Valladolid necesita una alineación potente y fiable en la que apoyarse y que no se debe retocar por el simple hecho de experimentar o de mantener a todo el mundo contento. Esto es fútbol profesional y la mejor forma de contentar a todos es ganando muchos partidos.