Abelardo se marcha entre lágrimas y perdona 4M¤
Había renovado hasta 2020
Mareo acogió ayer una de las jornadas mas emotivas de los últimos tiempos, con la despedida de Abelardo, entre lágrimas que compartió a su lado el presidente del Sporting, Javier Fernández, quien reveló que el entrenador "ha perdonado un dinero importante de un contrato basado en la confianza", indicó el mandatario. Se cifra en casi cuatro millones de euros la cantidad a la que ha renunciado el técnico con su dimisión.
El pasado verano, Abelardo había ampliado su contrato hasta junio de 2020, a razón de algo más de un millón de euros por año, según diversas fuentes. El técnico no solo no percibirá lo correspondiente a las tres temporadas que tenía por delante sino que "también ha perdonado dinero incluso de este año, porque era necesario para poder traer otro entrenador", recordó Fernández.
"Esta decisión ha sido pensando en el Sporting y en mi familia, más que en mi mismo", explicó Abelardo. "Siempre antepuse el club a lo personal; ya lo hice como jugador y ahora, como sportinguista, aunque tuviera un contrato hasta 2020, no puedo al club de mis amores reclamarle ese dinero", añadió.
Y concluyó de la siguiente forma sobre este apartado: "Para mí, lo más fácil habría sido cobrar mi contrato, pero amo tanto al Sporting como para no perdonarle esa cantidad. Para mí, lo importante no es el dinero sino otros valores, en este caso el sportinguismo y la lealtad hacia unas personas que apostaron por mí".
Abelardo hizo una despedida cargada de emoción y lágrimas. "Lloro por el cariño que tengo a toda esta gente, que son como una familia para mí, por este club y por esta afición, por el cariño que me han mostrado. Lloraré y sufriré como un sportinguista más siempre", afirmó.
Abelardo tuvo que cortar su mensaje en tres momentos, cuando se refirió a su hijo, a sus jugadores y a la afición. El ya ex entrenador del Sporting tuvo palabras de agradecimiento para muchas personas.
Respecto a la situación que ha desencadenado su dimisión, Abelardo confesó que vio que "el equipo no transmitía lo que yo quería, no me veía reflejado en el campo", pero exculpó a todos. "Toda la culpa ha sido mía", dijo quien más tarde prefirió no entrar en profundidad sobre las causas.
Abelardo deseó suerte a su sustituto Rubi, "el entrenador idóneo que necesita este equipo ahora; es una decisión acertada", afirmó.