La Cultural se topa con Becerra y Drazic resuelve
Ambos equipos tuvieron ocasiones para hacer más goles
En el partido de las oportunidades, Dejan Drazic dejó su impronta. Su pelota picada por encima de Leandro encandiló a un entrenador que quiere más frecuencia en las buenas intervenciones del serbio. Paco Herrera dio por bueno el ensayo ante una Cultural, que incidió en la competencia reinante en la portería del equipo pucelano. Becerra despachó las claras ocasiones que llegaron a su marco en una primera parte de claro color local. Ortí y dos disparos de Antonio Martínez rozaron el gol. El capitán blanco pudo, al fin, disputar un número apreciable de minutos en su continua puesta a punto. El juego de la Cultural crece con Martínez en el campo. Lo logró el Valladolid con los numerosos cambios que introdujeron ambos técnicos tras el descanso. Raúl de Tomás le dio otra velocidad y calidad a los ataques. Hizo pareja con el joven Higinio, que regresaba al Reino en el que dos temporadas atrás se le privó de una oportunidad.
Un debut. El catarí Tarek fue la principal atracción para la hinchada local en su presentación en sociedad. Pareció quedarle grande el traje. Acumuló imprecisiones en la entrega, la tónica del tramo final del partido. La contra originada tras la pérdida de Benja en campo de ataque la culminó Dejan Drazic con maestría, con una preciosa vaselina por encima de Leandro. Y pudieron llegar más goles. Villar desaprovechó el regalo de De Tomás, que no quiso rematar cuando encaraba al portero, Higinio no culminó su buen reverso en la frontal del área y Iago Díaz, ante Pau Torres, chutó desviado. Al fin y al cabo, se quedó corto el marcador para los méritos de dos equipos que cumplieron su propósito: reconciliarse con el balón en el caso de la Cultural y aumentar los kilómetros en las piernas de los menos habituales, tal y como deseaba Paco Herrera, que dio descanso a cuatro de sus titulares indiscutibles: Moyano, Balbi, Jordán y Michel, que descansaron en la grada.