10 años de una gesta
Ayer se cumplió una década del ascenso del Valladolid de Mendilibar
Entre los recuerdos más importantes que tiene la afición blanquivioleta en su memoria uno de los más emocionantes e increíbles fue el ascenso del Real Valladolid a Primera División en la temporada 2006-07 con José Luis Mendilibar en el banquillo pucelano. Aquel equipo hizo una temporada maravillosa, en la que batió algunos de los récords de la categoría y todavía hoy no son pocos los que sienten nostalgia de aquel equipo que arrasó en la categoría de plata con un fútbol directo, de mucha presión y algunos alardes. Fue un día tal como el de ayer, 22 de abril, cuando los jugadores pucelanos tomaron el Heliodoro Rodríguez López, estadio del Tenerife, para certificar, matemáticamente, el ascenso directo a la máxima categoría cuando todavía faltaban dos meses de competición, ocho jornadas por disputarse. Aquel encuentro terminó con 0-2, tantos de Víctor y Manchev. Al acabar el partido, la alegría se desbordó hasta altas horas de la madrugada y, al día siguiente, toda la ciudad se echó a la calle, a la orilla del Pisuerga, para aplaudir a los héroes de aquel sexto ascenso del club.
Aquella maravillosa temporada, el Real Valladolid terminó con 88 puntos con 26 victorias, 10 empates y tan sólo seis derrotas, y con un golaverage de ensueño: +35. Y es que marcó 70 goles y encajó 35 en una temporada en la que Alberto López, por supuesto, ganó el trofeo de portero menos goleado de la categoría de plata. Para los rivales, enfrentarse al Real Valladolid era ir camino del matadero. Y es que los pucelanos fueron el equipo que menos partidos perdió y el quinto que menos empató. Sólo el Almería logró mantenerse en la pelea con el Valladolid, quedó segundo sumando 80 puntos al final de la Liga. El tercer ascendido fue el Murcia, con 76, mientras que el desaparecido Ciudad de Murcia fue cuarto con 63, es decir 25 menos que el conjunto blanquivioleta.
29 jornadas sin perder. Hay que recordar que la temporada no empezó demasiado bien para el equipo de Mendilibar que tras ganar los dos primeros partidos de la temporada perdió en las jornadas tres y cuatro, empató en la quinta y volvió a caer en la sexta. Se abrieron las primera dudas, pero entonces el Real Valladolid cogió una racha impresionante de 29 partidos de liga sin perder (21 victorias y ocho empates) que le bastó para arrasar en la categoría y ascender. Sólo después de certificar el paso a la máxima categoría, los jugadores de Mendilibar bajaron un poco el pie del acelerador, empatando con el Murcia, en Zorrilla, 1-1, y perdiendo frente al Almería 3-2. El equipo empataría, de nuevo, frente al Cádiz 2-2, perdería con el Castellón y el Hércules, pero en las tres últimas jornadas, recuperados ya de todos los festejos, los blanquivioletas ganaron al Alavés, al Castellón y cerraron con tres puntos más frente al Numancia. Hay que destacar, además, que el equipo brilló en la Copa y sólo un mal partido frente al Deportivo (4-1) le impidió estar en las semifinales.
A cuartos en Copa Hizo una liga tremenda y en el torneo del KO fue de los ocho mejores