Roche se apunta
Recortó 29 segundos a Froome Trentin ganó la etapa a Rojas
ElPozo nos suena a charcutería. A buenos chorizos. También a un equipo de fútbol sala. A un equipazo de la LNFS. Desde ayer nos sonará igualmente a ciclismo. En la sede de esta empresa de alimentación, patrocinadora de la Vuelta a España 2017, en el término municipal de Alhama, acabó la décima etapa después de la subida al Collado Bermejo, y sobre todo después de un descenso que nos mantuvo con el corazón en un puño. Sin respiración. Es una bajada normalmente peligrosa, mucho más con la lluvia que había caído durante la jornada por la región de Murcia. Cuando llegaron los ciclistas, el pavimento ya estaba prácticamente seco. Aun así, Alejandro Valverde advirtió en pleno directo de TVE: “En cualquier descuido te puedes caer fácilmente”. Palabra de murciano.
Otros dos hombres de la tierra, compañeros de grupeta de Valverde, se metieron en la fuga de 18 corredores que se jugó la victoria: Luis León Sánchez y José Joaquín Rojas. Dos conocedores del terreno con ganas de triunfar en casa y, de paso, de anotar la primera victoria española. No hubo opción. El éxito se lo llevó un repetidor, Matteo Trentin, que sumó su segundo triunfo en esta Vuelta, que también es el cuarto del Quick Step. Abusones. El italiano llegó destacado con el propio Rojas, un ciclista con buena punta de velocidad, pero no tanta como para batir al hombre más rápido de esta edición. Le tocó el coco. Ya es mala puntería.
La formación de la escapada se resistió mucho, porque el pelotón partió de Caravaca de la Cruz como un rayo, a una velocidad de 52,3 km/h en las dos primeras horas de competición. Para que se hagan una idea, ese promedio marcaron Chris Boardman y Rohan Dennis, más o menos, cuando batieron el récord de la hora. La jornada de descanso había dado alas a los corredores, que aterrizaron en la meta con 40 minutos de adelanto.
Collado Bermejo. El triunfo se resolvió en el Collado Bermejo, como estaba previsto. Rojas tenía en el recuerdo su caída de hace dos años en el descenso de la Cresta del Gallo, el otro coloso de la orografía murciana. No quería otro accidente, esta vez no. Rojas coronó en primera posición, justo por delante de Trentin. Dos velocistas en cabeza. Detrás cruzaron Jaime Rosón y Jacques van Rensburg, mejores escaladores. La vida al revés. Los pájaros disparando a las escopetas. Rojas y Trentin aumentaron su ventaja en la bajada. Sin sobresaltos en los barrancos. No hubo caídas relevantes en ese tramo, más allá de un susto de Maté.
En la ascensión se vio trabajar al Bahrain con las cartas boca arriba: Vincenzo Nibali es un notable descensista. Y probó en las revueltas murcianas. Los hombres de Froome neutralizaron al Tiburón, pero no a Nicolas Roche, que sí consiguió abrir hueco y se plantó en las instalaciones de ElPozo con 29 segundos. Ahora es segundo en la general, empatado con Esteban Chaves, a 36” del maillot rojo. Buen golpe del irlandés. Nadie pensaba en Roche para el podio de la Vuelta. Quizá haya que empezar a hacerlo. O quizá por eso hizo camino. Hoy, en la subida a Calar Alto, primera llegada en alto de la trilogía andaluza, tendremos más respuestas.