AS (Valladolid)

En el Camp Nou no temen por el futuro azulgrana de Messi

Fuentes del club insisten a AS: “Sólo falta la firma protocolar­ia” y ya se busca una fecha

- MOISÉS LLORENS BARCELONA

El pasado 5 de julio, dos semanas antes de salir de pretempora­da a EE UU y pocos días después de la bod Roccuzzo, el Barcelona emitió un comunicado en el que anunciaba la renovación de La Pulga hasta 2021. bien al club culé, que perdió a Neymar, un socio promueve una moción de censura y el club no encuen

Ayer se cumplieron dos meses desde que el Barcelona emitió un comunicado oficial dando por segura la renovación del contrato de Lionel Messi hasta el 30 de junio de 2021. Desde esa fecha, en vez de caminar el club por la senda de la tranquilid­ad, las cosas se fueron complicand­o hasta el punto de que Neymar ya no sigue en la entidad (firmó por el PSG a cambio de 222 millones), el socio tiene la posibilida­d de ejecutar una moción de censura (Agustí Benedito agarra foco mediático) y las críticas a la gestión deportiva del primer equipo son un volcán en las redes sociales hasta el punto de que se convocó para el sábado, día de derbi ante el Espanyol, una pañolada contra Josep María Bartomeu.

Con todo, en el Camp Nou siguen muy tranquilos. Fuentes del club azulgrana consultada­s por AS insistiero­n en el mensaje que hace más de un mes están lanzando. “Estamos muy tranquilos en relación a ese tema. Todo está arreglado desde hace tiempo”, afirman, a la vez que vuelven a indicar que “sólo queda la firma protocolar­ia con el presidente”. En este sentido, desde el club trabajan con el entorno del futbolista para encontrar el momento adecuado y oportuno, teniendo en cuenta que el calendario de partidos en las próximas semanas está más que cargado. Las dos partes hace días que buscan un hueco que cuadre bien en las dos agendas para finiquitar la incertidum­bre.

Recuerdo a 2014.

Dicen en los despachos del Camp Nou que el ambiente entre las dos partes no es malo, aunque hubo acontecimi­entos que no acabaron de gustar a Messi. La marcha de Neymar es un ejemplo, al que debe sumarse la ambición de Lionel por tener una plantilla competitiv­a que le invite a poder pelear por todo, algo que no acabó por poder concretars­e el día que se cerró la ventana de verano. Así, lo que se vive en la actualidad, a priori, nada tiene que ver con lo sucedido en 2014, cuando Messi rubricó hasta 2018 el contrato antes de irse al Mundial de Brasil. En aquella época las cosas estaban tensas, hasta el punto de que el día que firmó (20 de mayo) primero se hizo la foto y una vez en el aeropuerto de El Prat estampó el contrato, retornándo­lo un mensajero de vuelta al club: fue entonces cuando el Barça, por la tarde dio oficialida­d a la ampliación de contrato.

Todo hace indicar que Messi seguirá en el Barça. Ese es su deseo, el de Bartomeu y los culés, aunque a Lionel le cueste sonreír por ahora.

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